Empresarios y empleados de los dos sebaderos clausurados por la Procuraduría Ambiental y de Ordenamiento Territorial (PAOT) negaron haber violado los sellos colocados por ésta en sus establecimientos.
El 19 de marzo, la dependencia estatal clausuró dos sebaderos, ubicados en Arroyo Hondo 217 y 219, debido a que no contaban con autorización para la generación de residuos de manejo especial.
El domingo la PAOT informó que había demandado penalmente a quien resultara responsable de violar los sellos de clausura impuestos en una de las dos empresas sancionadas.
Ayer, AM acudió al lugar para confirmar cuál de las dos habría sido la demandada, las dos aseguraron tener los sellos intactos.
“No hemos trabajado en el área de los sellos ni los hemos quitado. Ya empezamos los trámites para sacar el permiso que nos faltaba pero son muy tardados”, aseguró Marcos Fabián Andrade Guerrero, hijo del propietario del sebadero marcado con el número 217.
Sin embargo, otro trabajador de la zona desmintió la versión.
“Ellos le pagaron a alguien para que les resolviera el problema y según ya habían arreglado y quitaron los sellos, pero luego vinieron otra vez (la PAOT) y se los volvió a poner hace como 15 días”, mencionó.
Por su parte, Miguel Castillo Cedillo, encargado del 219, señaló que nadie ha trabajado en el lugar desde la clausura efectuada en marzo.
Ante esto, la PAOT informó que investiga cómo se dio la violación de los sellos.
Antonio Silva Muñoz, coordinador de Procesos Jurídicos de la dependencia, comentó que después de la clausura gente de la CONAGUA se acercó para informar que necesitaba hacer unos estudios en Arroyo Hondo, incluyendo los negocios clausurados.
“Querían hacer unos estudios en la zona y comentaron que veían conveniente quitar los sellos pero nunca se confirmó nada. El propietario argumentó que CONAGUA lo había hecho y por eso la demanda es contra quien resulte responsable.
“Ya se acercó (el propietario) sin embargo no ha concluido el trámite para tener los permisos correspondientes”, dijo el funcionario.
En tanto, Humberto Navarro de Alva, delegado de CONAGUA en Guanajuato, aseguró que bajo ninguna circunstancia ellos intervinieron en el proceso de la PAOT en contra de los sebaderos, y advirtió que en caso de que se utilice indebidamente el nombre de la dependencia a su cargo, procederán legalmente.
“Nosotros no autorizamos de ninguna manera el retiro de esos sellos, eso es competencia de la PAOT y no sé qué documentos hayan presentado (los propietarios). Con toda puntualidad digo que procederemos sin titubeos si hay algún uso indebido del nombre de la CONAGUA”, afirmó el funcionario.
Pega cierre de Química
La clausura de Química Central de México afectó a algunos curtidores, pues tuvieron que buscar una nueva proveedora de químicos.
Señalaron que el principal inconveniente fue encontrar a un nuevo proveedor que les brindara confianza como QCM.
“Al principio nos destanteó porque estás acostumbrado a comprarles a ellos y a tener un ritmo de trabajo con ellos, entonces es empezar de nuevo, volver a ver precios y checar la calidad y que te funcione como el anterior, pero ahorita ya le hallamos”, comentó Luis Martín Orrego, encargado de Curtidos Hernández.
Por su parte, un trabajador de la empresa Mexcuero, ubicada en Santa Crocce, dijo que la noticia de la clausura les sorprendió, y aunque después de unos días Química Central de México les siguió proveyendo, luego tuvieron que buscar otra empresa.
“Cuando nos dijeron nos sorprendió pero luego el patrón buscó otra empresa y la verdad es que sí funciona el producto y los precios son similares”, mencionó.
El pasado 4 de junio, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) clausuró de manera total temporal la planta de Química Central de México en San Francisco del Rincón por almacenar 340 mil toneladas de residuos tóxicos al aire libre.
Esto, según dijeron curtidores, trajo cambios en su logística de trabajo.