Dos estilos completamente distintos en el ring, y al final una decisión dividida.
Dos jueces vieron ganar al “Canelo” y otro más al cubano en la pelea estelar de la cartelera “Honor + Gloria”, que se realizó en la Grand Garden Arena del Hotel MGM Grand & Casino, en Las Vegas, Nevada.
El mexicano Saúl Álvarez se topó ayer con Erislandy Lara, un peleador escurridizo, que conectaba golpes y salía a correr por todos los rincones del ring.
“Yo vine a pelear no a correr. Aquí no se gana con correr, sino con pegar”, apuntó Saúl al momento que era vitoreado por más de 14 mil almas. “Yo quería darle a la gente una pelea, y él no vino a pelear”.
Saúl dejó su marca en 44-1-1, 31 KO’s, y su siguiente pelea sería en octubre o noviembre. El posible rival sería el monarca mundial Mediano del CMB, el boricua Miguel Ángel Cotto.
Se lleva “Canelo” cerrada decisión
Dos jueces le dieron la pelea al mexicano.