La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició una investigación por el derrame de crudo de una refinería de Pemex sobre el río San Juan, en el Municipio de Cadereyta, Nuevo León, ocurrido el pasado fin de semana.
En un comunicado, el organismo informó que indaga posibles violaciones a los derechos humanos de los habitantes afectados por el accidente, que amenaza con alcanzar la presa El Cuchillo, la cual abastece a la zona metropolitana del Estado.
A instancias del Ombudsman nacional, Raúl Plascencia Villanueva, visitadores adjuntos se trasladaron a la zona del percance para recabar información que permita determinar los daños causados a la población y al ambiente, indicó la CNDH.
Agregó que el personal atenderá las quejas de los afectados y les proporcionará asesoría.
“La Comisión Nacional de los Derechos Humanos es consciente de la importancia de la protección del derecho a un medio ambiente sano para el desarrollo y bienestar, así como el derecho al acceso, disposición y saneamiento de agua para consumo personal y doméstico en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible que deben tener todos los ciudadanos”, afirmó.
El derrame de hidrocarburo fue provocado por la fuga de una toma clandestina del oleoducto Madero-Cadereyta, perteneciente a la refinería Ingeniero Héctor R. Lara Sosa, de Pemex.
La fuga contaminó 11.5 kilómetros de un canal de riego y 6.5 kilómetros del río San Juan.
El incidente, ocurrido el sábado pasado, fue dado a conocer por la petrolera hasta el miércoles.