Familiares de otro de los seis reos trasladados del Cereso de León al de Pénjamo denunciaron abusos de autoridades por parte de custodios que tomaron represalias en su contra.
La hermana de Jesús Edmundo Torres Hernández denunció que desde que ingresó al Cereso ha sido víctima de castigos injustificados, ha sido golpeado y acusado de extorsionar al resto de internos y familiares.
Blanca Guadalupe contó que su ella y su hermano vivían en Estado Unidos. Después él se regresó.
Enfermo de la columna, Jesús estaba en tratamiento y un día después de haber surtido una de dos recetas médicas, fue detenido por la Policía Municipal.
Al ser revisado, le encontraron 30 pastillas, pero fue acusado de portar 196 comprimidos. Tras ser denunciado por delitos contra la salud, el joven pagó menos de 7 mil pesos de fianza.
Blanca señaló que a raíz de la detención de su hermano, se regresó de Estado Unidos por que ella es su único familiar.
Para sacar a su hermano de la cárcel, contrató a un abogado quien le cobró 25 mil pesos, pero después del pago, el licenciado nunca se presentó en su defensa.
Según Blanca, personal del juzgado al ver que el abogado no se presentaba, lo dejaron ir.
Jesús se regresó a Estado Unidos, en donde estuvo tres años. A principios de 2014, se regresó a León y el 20 de febrero fue aprehendido por el mismo hecho.
Al ingresar al Cereso tras una sentencia de cuatro años cinco meses, Jesús fue acusado de extorsionar a los reclusos.
Sin embargo, Blanca señaló que su hermano no tenía contacto con el resto de los reos.
Jesús fue golpeado constantemente en varias ocasiones con el argumento de haber extorsionado no sólo a los reclusos, sino también a sus familiares.
Además, lo dejaban dormir en el suelo y sin cobija al grado de enfermarse de gripe.
La hermana de Jesús habló con el director del Cereso, quien le dijo que se habían equivocado y que investigaría su caso.
“Las veces que mi hermano fue golpeado, lo mantuvieron incomunicado, no lo dejaban que hiciera llamadas, ni recibiera visitas”, dijo Blanca.
La mujer aseguró que la persona que mandaba a golpear a su hermano era el jefe de guardias, Armando Molina Barrientos, y al comandante al que sólo conocen como “Chacón”.
Hasta este domingo Blanca se dio cuanta del traslado de su hermano al Cereso de Pénjamo y trató de hablar con el director del Cereso en León, que se ha negado.
Denuncian abusos y golpes en Cereso
Familiares de otro de los seis reos trasladados del Cereso de León al de Pénjamo denunciaron abusos de autoridades por parte de custodios que tomaron