Tránsito adolescente es amable con piedadenses

Cuando sea grande desea servir a la ciudadanía, comentó Francisco, de 15 años, quien desde hace un trienio forma parte del equipo de Tránsito Infantil de La Piedad.
Para ser un buen tránsito “hay que ser responsable y amable con los ciudadanos”, comentó el adolescente, que además de ser elemento de esta patrulla infantil estudia la secundaria.
Participa fomentando la cultura vial tanto para conductores como peatones, y en sus ratos libres disfruta jugar futbol y basquetbol con sus amigos, anteriormente trabajaba medio tiempo en una farmacia para ganar un poco de dinero y solventar algunos de sus gastos, pero esto ya le es posible debido a sus actividades.
Apoya a sus compañeros diciéndoles cómo referirse a los ciudadanos, después de tres años de brindar este servicio en tránsito infantil se podría decir que tiene mayor experiencia sobre otros niños y adolescentes que se han ido integrando.
Pero no siempre resulta fácil eso de ser un tránsito, “pues hay algunos conductores que se muestran groseros cuando les hacemos un llamado de atención, mientras que otros nos respetan y hacen lo que les sugerimos”, expresó.
Tanto es el gusto y la satisfacción de su labor, que Francisco desea ser elemento de Tránsito de manera oficial en La Piedad, cuando sea más grande, quiere ser un hombre más preparado y desea terminar sus estudios.
El tránsito adolescente recomendó a conductores y peatones usar el cinturón de seguridad en todo momento, señalando ésta la falta más común que cometen los que van al volante, sobre todo en la Zona Centro de la ciudad, “recuerden que es por su bien”, añadió.