Tras una marcha para exigir la presentación con vida de sus 58 compañeros desaparecidos en Iguala, estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa realizaron destrozos en el edificio del Congreso local.
Los manifestantes exigían la destitución del Gobernador Ángel Aguirre y del Alcalde de Iguala, José Luis Abarca, a quienes señalaron como autores intelectuales del asesinato de los normalistas.
En la marcha participaron estudiantes de Ayotzinapa y de otras normales públicas locales, así como los padres de algunos de los desaparecidos y profesores.
Al llegar a la sede del Poder Legislativo incendiaron tres muñecos con los retratos del Gobernador Ángel Aguirre, del Presidente Enrique Peña Nieto y del Alcalde de Iguala, José Luis Abarca.
Uno de los dirigentes de la escuela, por medio de un megáfono, advirtió al presidente de la comisión de Gobierno del Congreso, el perredista Bernardo Ortega, que le daban cinco minutos para ser atendidos y pedirle su intervención ante el Gobierno federal para que localicen a los normalistas desaparecidos.
Ninguno de los legisladores se encontraba en las instalaciones debido a que sesionan hasta hoy.
Pasados los cinco minutos, los manifestantes empezaron a taparse el rostro y se colocaron en fila frente a la biblioteca “Siervo de la Nación” donde lanzaron proyectiles a los cristales que quedaron en añicos.Varios de ellos se brincaron la puerta de acero y lanzaron piedras contra los cristales del acceso principal.
Cuando el grupo de encapuchados quería ingresar al salón, uno que iba al frente de ellos los contuvo.
Los padres de los jóvenes desaparecidos y maestros de la Ceteg no participaron en los disturbios.
Ayer a las 12 de la noche, los cadáveres de dos estudiantes asesinados a balazos el viernes fueron trasladados a sus lugares de origen para que sus familiares le den sepultura.
Un tercer estudiante muerto se encuentra en el Servicio Médico Forense debido a que aún no ha sido identificado por sus familiares.
Los normalistas anunciaron intensificar sus movilizaciones pero ya con el apoyo de sus demás compañeros del resto de las normales del País que arribaran a Tixtla mañana miércoles.
Acusan que ‘no hay búsqueda’
No existen indicios de que las autoridades hayan iniciado la búsqueda de 58 estudiantes presuntamente detenidos por la policía de Iguala luego de atacarlos a balazos.
Así lo informó el abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Vidulfo Rosales. Dijo que las autoridades de la Procuraduría de Justicia integraron una averiguación previa por la desaparición de 58 personas, y de que según hay operativos de las policías federal, estatal y del Ejército Mexicano en Iguala en su búsqueda.
En opinión de Vidiulfo, en los hechos del viernes en la noche hay responsabilidad del Alcalde de este municipio, José Luis Abarca, de los integrantes de la Policía Municipal y de las autoridades ministeriales.
En el caso de los policías preventivos, hicieron un abuso de su fuerza además de que existen testimonios de que dispararon a los estudiantes después de haberlos perseguido por las calles de Iguala porque supuestamente habían sustraído dos autobuses de la central camionera.
En el caso de las autoridades ministeriales estatales, también tienen culpa porque después del primer ataque contra los jóvenes, nunca llegaron a realizar las diligencias de ley.
Consignan ante juez a policías
Los 22 policías municipales de Iguala fueron consignados ante un juez bajo el delito de homicidio calificado y lo que resulte, informaron autoridades ministeriales de Guerrero.
Los uniformados fueron trasladados primero de Iguala a Acapulco la noche del domingo para rendir su declaración ante el Ministerio Público estatal y posteriormente los llevaron al penal de este municipio, donde llevarán su juicio.
El pasado 27 de septiembre, el titular de la secretaría de Seguridad Pública de Iguala, Felipe Flores Velázquez, declaró junto a 165 agentes ante las autoridades ministeriales y tras las pruebas realizadas retuvieron a 22 elementos, informó el Procurador estatal, Iñaki Blanco Cabrera.
“Los elementos de la policía municipal, al rendir declaración, fueron coincidentes en manifestar que no agredieron a persona alguna, no obstante, tres de ellos aceptaron disparar al aire”, indicó.
Sin embargo, señaló que siete estudiantes identificaron físicamente a sus agresores, 13 refirieron que sus victimarios son elementos de seguridad pública municipal de Iguala y 13 mencionaron la forma en que ocurrieron los hechos.
Dieciséis de los agentes dieron positivo en la prueba de rodizonato de sodio para el uso de arma de fuego.
“No descartamos que pudiese existir responsabilidad del secretario (de seguridad) ni tampoco del Alcalde (José Luis Abarca Velázquez), es una parte que estamos investigando.
“Es indudable, creo yo, que existió un uso excesivo de la fuerza, creo yo también, que la respuesta de los elementos policiales no fue proporcional, por el contrario, me parece que fue desmedida, no hay justificación alguna para que hayan hecho uso del arma de fuego”, sostuvo el Procurador.
Visitadores de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) verificaron la condición física de los detenidos en las instalaciones de la fiscalía.
Por otra parte, el abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Vidulfo Rosales, denunció que no existen indicios de que las autoridades hayan iniciado la búsqueda de los 58 estudiantes presuntamente detenidos por la policía municipal de Iguala.
“Pero la gente de Iguala y los familiares de los desaparecidos aseguran que no hay tal búsqueda”, refirió.