Niños de casa hogar saludan a jugadores del equipo de León

Los niños de la casa hogar San Antonio visitaron por primera vez el estadio León para apoyar a la Fiera en su partido contra Monterrey.
Luego de saludar a los jugadores pasaron a las primeras filas para ver de cerca el partido.
A las 5 de la tarde los niños esperaban en la entrada a vestidores a que los jugadores pasaran para poder saludarlos,  cuando éstos llegaron vieron un montón de manitas que trataban de hacer contacto con ellos.
La empresa especializada en tecnologías en la información UST Global se encargó de organizar la visita de los niños al estadio, y alrededor de 15 trabajadores de la empresa trabajaron en su cuidado.
Elías Ramírez Navarro, de 13 años, tiene más de la mitad de su vida viviendo en San Antonio.
“Mis papás me metieron aquí porque no querían que terminara como mis dos hermanos que se drogaban mucho, no querían que hiciera lo mismo”, dijo.
Aseguró que extraña convivir con su familia, aunque se siente contento de estar acompañado de otros niños y en el caso de ayer, especialmente feliz por tener la oportunidad de ver el partido de León.
“Como que no me llamaba la atención cuando me dijeron que íbamos a venir, pero ahorita sí estoy emocionado, creo que van a quedar 2-0 favor León, me gustaría poder jugar con el equipo cuando sea grande”, dijo Elias.
Diego Sánchez Cornejo tiene seis años en la casa hogar, antes vivía con su mamá pero el sueldo de ella no le permitía atender a su familia.
“Comíamos frijoles y tortillas casi todos los días, a veces pan con leche, nos daba poquito para que no se acabara tan rápido”, dijo Diego.
Sara Guerrero, trabajadora social de la casa hogar, mencionó que actualmente se trabaja con 48 niños de diferentes colonias de la periferia de León
“Muchos de estos niños son canalizados por el Gobierno, los rescatan de padres golpeadores o de alguna situación de riesgo, otros son de ingreso voluntario, generalmente los traen porque los padres no pueden mantenerlos o darles educación”, dijo.
Explicó que los niños tienen poca calidad de vida fuera de las instalaciones de San Antonio, viven en condiciones de inseguridad y carecen de vivienda digna.