La designación de Alejandro Vanoli al frente del Banco Central, a quien el mercado considera proclive al intervencionismo y al control cambiario, provocó el desplome de la bolsa de comercio en Buenos Aires.
El índice Merval de las acciones líderes del mercado bursátil caía 7,7%, a 10.625 unidades, a las 1600 GMT. En tanto, el dólar que cotizaba en el mercado paralelo experimentó una fuerte subida de 15,95 y luego se situó en 15,70 pesos, 5 centavos arriba de la cotización del miércoles. En la víspera, la bolsa había cerrado con una caída de 8%.
Vanoli, hasta ahora presidente de la Comisión Nacional de Valores, reemplazará a Juan Carlos Fábrega como titular del banco emisor, quien renunció a raíz de las críticas que recibió de la presidenta Cristina Fernández días atrás.
La mandataria sugirió que desde el Banco Central se habría filtrado información sobre una inminente reducción del porcentaje de tenencia de dólares autorizado a los bancos, lo que motivó una fuerte depreciación del peso argentino ante la divisa.
Analistas consideran que Vanoli es un convencido del intervencionismo estatal en la economía y que posiblemente aplique mayores controles a los bancos, frene la salida de dólares y ponga férreos controles en el mercado cambiario, en sintonía con las políticas del ministro de Economía Axel Kicillof.
El jefe de gabinete Jorge Capitanich dijo a periodistas que lo que tiene que hacer el nuevo titular de la entidad financiera cuyo pliego será remitido próximamente al senado para su aprobación definitiva, aunque ya puede asumir el cargo, “es cumplir con la carta orgánica del Banco Central… propiciar las condiciones para el crecimiento de la economía y del empleo y la estabilidad cambiaria y monetaria”.
El economista y ex presidente del Banco Central Marín Redrado señaló a radio La Once Diez que la designación de Vanoli el oficialismo “va a tratar de planchar el tipo de cambio para que no se dispare más, pero esto genera atraso cambiario, represión y en algún momento eso sale por algún lado”.
Agregó que “la pulseada del tesoro la ganó el Ministerio de Economía desde el 2010 y desde ahí el Banco Central se convirtió en una caja del gobierno. Kicillof cree que atrasando el tipo de cambio va a controlar la inflación, y esto va a repercutir en los sectores productivos que cada vez ven sus costos en dólares aumentar más”.
Los cambios en la entidad emisora se producen en un contexto de creciente incertidumbre por la recesión económica y el alza del costo de vida, que según el gobierno fue de 18,2% en los primeros ocho meses del año, mientras que para economistas privados estaría entre 35% y 40%.

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