El arroyo de Los Castillos se desbordó ayer debido a las fuertes corrientes de agua que bajaron de la Sierra de Lobos, por lo que para desfogar el agua se derribó un dique construido para llevar a cabo las obras del Parque Lineal La Sardaneta.
Las lluvias registradas la noche del miércoles y madrugada de ayer generaron grandes avenidas de agua que bajaron por el arroyo de Los Castillos, en la colonia del mismo nombre, al norte del municipio.
La empresa constructora Gifsa, encargada de los trabajos de la tercera etapa del parque lineal, desde el bulevar Hidalgo hasta el Parque Metropolitano, construyó un dique para desviar el agua por un pequeño canal hacia el arroyo El Granizo, para poder trabajar en la limpieza del arroyo de Los Castillos.
“Sin embargo no teníamos previsto que lloviera tanto en estos días y el agua nos ganó. Bajó mucha agua del cerro y el canal de desvío no fue suficiente para desfogar el agua, por lo que se tuvo que romper el dique que se construyó para poder limpiar el arroyo de Sardaneta y colocar los gaviones para el parque lineal”, explicaron el ingeniero Jorge Dávila, y el arquitecto José Trinidad Méndez Velázquez.
Protección Civil intervino durante la madrugada; con maquinaria pesada rompieron el dique para darle fluidez a las fuertes avenidas que bajaban hacia la presa El Palote.
Hubo alarma entre los vecinos de la colonia Los Castillos.
“El agua está subiendo de nivel. Se desbordó el arroyo y amenazaba con inundar viviendas. Por ello tuvieron que romper el dique para bajar el nivel del agua”, dijo Micaela Mendoza, vecina visiblemente preocupada.
Decenas de personas se dieron cita en el puente que cruza el bulevar Hidalgo, dado que las fuertes avenidas de agua ofrecían un gran espectáculo.
La empresa constructora bloqueó el canal que abrió para desviar el agua y paró los trabajos del proyecto de Sardaneta que arrancó el pasado 25 de septiembre y que consta de 4.4 kilómetros para comunicar al Zoológico con el Parque Metropolitano,con una inversión de 190 millones de pesos del Gobierno del Estado.
Debido a este proyecto se está desviando el agua que baja de las presas La Manzanilla y Media Luna, en Sierra de Lobos, hacia el arroyo El Granizo, y que finalmente se canaliza al río de Los Gómez.
Se llenan presas y bordos
Las torrenciales lluvias registradas en los últimos días han puesto en alerta a las autoridades de Protección Civil, en razón de que los más de mil 300 bordos y embalses que hay en León se encuentran a su máxima capacidad, recibiendo grandes volúmenes de agua desde la Sierra de Lobos.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) pronostica fuertes lluvias este fin de semana en el estado de Guanajuato, de 25 a 50 mm (litros por metro cuadrado) en algunas zonas por efectos de la tormenta tropical Simón, que se localiza en el océano Pacífico, frente a las costas de Jalisco y Colima.
Informó que las principales presas de la entidad, como Solís, Yuriria, Allende, Purísima y Tepuxtepec, están a su máxima capacidad.
El director de Conagua en Guanajuato, Humberto Carlos Navarro de Alba, informó que debido a las fuertes precipitaciones de las últimas horas, se están monitoreando los principales embalses y se les está tirando agua.
Destacó que hay riesgo en algunas de las presas, en tanto que la de El Palote también se está a su máxima capacidad.
“La presa que se localiza en el Parque Metropolitano está desfogando agua a través de un desagüe de fondo”, dijo.
Debido a los trabajos del distribuidor vial Benito Juárez que realizan en el río de Los Gómez, a la altura del bulevar Morelos, se han tenido que desviar grandes volúmenes “aguas arriba” para evitar que lleguen a la presa de El Palote.
En la comunidad de Ibarrilla abrieron las compuertas del arroyo El Granizo para desviar el agua.