La tradición de celebrar el Día de Muertos poco a poco va muriendo, las celebraciones de Halloween ganan terreno y con ello las costumbres mexicanas van perdiendo identidad, valor y hasta derrama económica.
Actualmente la gente ya no compra dulces de alfeñique como antes, ahora se adquieren objetos relacionados con las costumbres estadounidenses.
El sacerdote Miguel Martínez explicó que el día 1º de noviembre la Iglesia católica honra a todos los santos y el día 2 de noviembre la liturgia católica hace memoria de los fieles difuntos.
Señaló que el Halloween resulta más atractivo para la fiesta y un buen pretexto para que la mercadotecnia utilice estrategias para el comercio y el consumo de productos que hacen gastar en algo innecesario y ajeno a las tradiciones mexicanas.
En el municipio tiene un gran arraigo ser artesanos alfeñiqueros, “pues vienen desde generaciones la elaboración de éstos dulces, pero hoy ya no es negocio”, dijo Blanca Jauregui.
El proceso de elaboración y los diseños del alfeñique ha variado con el tiempo, dijo Doña Carmen, hace 50 años los diseños tradicionales de esa época eran los burritos cargados de leña o con cántaros, canastas, borreguitos, frutas, changuitos, puercos, puercas amamantando a sus puerquitos, gallinas con sus pollitos, patos, muñequitas, gitanas echando las cartas, corazones, leones y otros animales, hoy éstas tradiciones se han combinado con algunos aspectos del Halloween.
“Tenemos que vender cosas de días de muertos y de Halloween, porque la gente lo pide, sabemos que es mejor seguir nuestras tradiciones, pero hoy vende más la cultura de los gringos”, dijo la comerciante.

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