En memoria de sus difuntos, visitan sus tumbas

Los panteones de Moroleón, Dolores y Nuevo, presentaron un lleno en Día de Muertos.
Entre rezos, canciones, sonrisas y llantos, fueron recordados los difuntos que descansan eternamente en estos lugares.
Cientos de personas llegaron a los panteones de la ciudad  de Yuriria desde las 8 de la mañana para visitar a sus familiares y amigos que se adelantaron en el camino.
Como ya es costumbre, los visitantes llegaron para adornar con flores las tumbas de sus seres queridos, a los cuales también contrataron grupos musicales y tocar sus canciones.
En la celebración por el Día de Muertos, el panteón municipal de Uriangato se convirtió en una romería y un punto de encuentro para la añoranza y la tristeza.
El camposanto estuvo lleno de personas que durante todo el día entraban y salían para rendirle tributo a familiares y amigos que ya no están en este mundo.
El domingo, como ningún otro del año, se abarrotaron los ramos de flores que daban una vista atractiva a las tumbas y las cuales fueron el escenario para que las personas soltaran su tristeza y añoranza.
Miles de salvaterrenses acudieron a los diferentes panteones de Salvatierra para visitar a sus familiares fallecidos.
Desde las 7 de la mañana la población comenzó a llegar a los cementerios, depositando en las tumbas hermosos arreglos florales.
De igual forma rezaron varias oraciones y escucharon misa por el eterno descanso de sus difuntos, otros más pintaron o limpiaron dichos sitios y unos más llevaron grupos musicales para recordar a sus fallecidos.
La familia Rico Zamudio, desde 1958 acuden cada año al panteón San Elías a visitar los restos de su padre y abuelo Ángel Rico Reyes, a quien le llevan flores, veladoras y le arreglan su tumba.