José Luis Abarca llegó a la candidatura del PRD a la alcaldía de Iguala en medio de una pugna entre distintas corrientes por los principales espacios en juego en la elección guerrerense.
Lázaro Mazón, David Jiménez Rumbo y Ángel Aguirre presionaban para obtener la candidatura del municipio, la tercera ciudad guerrerense detrás de Acapulco y Chilpancingo.
Mazón, mencionado por Andrés Manuel López Obrador para la candidatura de Morena al Gobierno estatal, llevó a un aspirante externo, José Luis Abarca, y presionó con la amenaza de irse del PRD si no aceptaban a su protegido.
Jiménez Rumbo, líder del Grupo Guerrero y de la corriente Alternativa Democrática Nacional (ADN) en aquella entidad, impulsaba a Justino Carbajal Salgado, sobrino de Félix Salgado Macedonio, ex alcalde de Acapulco. Esa opción tenía el apoyo inicialmente de Nueva Izquierda.
Ángel Aguirre empujaba por su parte a Óscar Díaz, quien era el aspirante mejor posicionado en las encuestas internas, con ventajas de al menos cuatro puntos frente a sus rivales.
Ese candidato también era apoyado por Arturo Hernández Cardona, fundador del PRD, líder de Izquierda Democrática Nacional (IDN) en Guerrero y quien sostenía una añeja rivalidad con Lázaro Mazón.
Formalmente la dirigencia estatal definía las candidaturas; sin embargo, el presidente perredista en la entidad, Carlos Reyes –quien todavía comanda el partido–, era parte ADN, una de las corrientes que tenían a su propio candidato (Carbajal Salgado).
En este escenario decidió intervenir el dirigente nacional, Jesús Zambrano, en favor de Abarca.
“Zambrano controla la comisión de candidaturas. Zambrano lo impone”, afirmó una fuente cercana a la dirigencia nacional.
Otras fuentes señalan, sin embargo, que el presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática estaba entonces muy ocupado resolviendo las 300 candidaturas a diputados federales y las 128 al Senado, por lo que no pudo haber intervenido en una designación local.
Abarca fue elegido candidato de la alianza PRD-PT-MC, lo que significa que los líderes de los tres partidos tenían derecho de veto en contra de alguna postulación.
Esa fórmula sólo se acordó en 16 municipios de Guerrero, y de ese total obtuvieron el triunfo en 10, Iguala y Acapulco entre ellos.
Luis Mazón, hermano de Lázaro, quedó como suplente del Alcalde en la lista de regidores, y una vez designado como Presidente Municipal, Abarca llamó a Felipe Flores para que ocupara la Secretaría de Seguridad Pública, cargo que había ostentado entre 1997 y 2000 bajo las órdenes de Lázaro Mazón, quien era el Alcalde.
En la negociación, Aguirre convenció a Óscar Díaz para que aceptara la diputación local y Jiménez Rumbo persuadió a Carbajal Salgado para que aceptara la posición de Síndico Procurador en el Ayuntamiento encabezado por Abarca.
El 8 de marzo de 2013, unos meses después de iniciada la administración municipal, Carbajal Salgado fue asesinado a balazos afuera de su domicilio.
El 30 de mayo de ese mismo año, Arturo Hernández Cardona fue secuestrado junto con otros líderes de su movimiento. Tres días después apareció muerto en una brecha.
El 26 de septiembre de 2014, un comando integrado por policías municipales y sicarios del cártel Guerreros Unidos levantó y desapareció a 43 normalistas de Ayotzinapa con la consigna de asesinarlos.
Por esos crímenes está acusado José Luis Abarca, el candidato externo al que nadie le cerró la puerta.

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