El comisionado general de la Policía Federal, Enrique Galindo Ceballos, advirtió ayer que ya no permitirán que se tomen las casetas de peaje.
De hecho, desde ayer, mil 500 agentes de la corporación fueron desplegados en Guerrero, principalmente, para evitar que manifestantes cierren autopistas o permitan el paso libre de los conductores.
La medida fue tomada por el Gobierno federal una vez que la PGR dio su versión oficial en la que ratifica que los normalistas de Ayotzinapa fueron asesinados.
“Por orden superior, atenderemos el reclamo ciudadano de garantizar el libre paso de los vehículos en la Autopista del Sol y, a partir de ahora, no permitiremos que se tomen las casetas de peaje”, les dijo Galindo a los agentes al hacer el pase de revista en el aeropuerto de Chilpancingo.
Desde la entrada a Guerrero, las casetas de Paso Morelos, Palo Blanco y La Venta serán resguardadas. Los agentes están preparados con toletes, escudos y cascos.
El Ejército también desplegó 3 mil 600 efectivos en el Estado para la custodia de escuelas, centros comerciales y turísticos, así como para reforzar puestos castrenses para la revisión de vehículos en carreteras federales a fin de detectar armas y drogas.
Detienen y liberan a normalistas
Elementos de la Policía Federal detuvieron y golpearon ayer a cinco estudiantes (cuatro hombres y una mujer) de la Escuela Superior de Educación Física luego de perseguirlos de la caseta de La Venta hasta la de Palo Blanco de la Autopista del Sol.
Según los normalistas, no realizaban boteo, sólo se trasladaban a Chilpancingo para participar en una protesta cuando fueron perseguidos y detenidos.
Después ante la presión de otros normalistas los detenidos fueron liberados.