Un hombre murió intoxicado y con quemaduras en la mayor parte su cuerpo, luego de que las llamas y el humo del fuego que le prendió a sus tierras de cultivo lo alcanzaron; el hecho ocurrió en la ciudad de Acámbaro.
El hombre se llamó J. Antonio Alanís Ángeles, de 63 años, con domicilio en la comunidad de La Virgen en Tarandacuao.
Fue a la una de la tarde del jueves, que la Central de Emergencias de Acámbaro, reportó la existencia de una persona sin vida en el camino de terracería que lleva de la comunidad de Arrollo de la Luna hacia Santa Inés.
Al trasladarse elementos de la Policía Ministerial y del Ministerio Público, localizaron tirado de costado derecho, a un hombre que presentaba quemaduras de tercer grado entre el 80 y 90% de su cuerpo.
En la versión que dio un familiar del occiso, dijo que por la mañana Alanís Ángeles salió de su casa para trabajar en unas tierras de cultivo de su propiedad, donde quemaría el rastrojo para poder cultivarlas después.
“El hijo del fallecido nos informa que su papá salió temprano a trabajar en las tierras donde siembran, ya que iba a quemar la tierra para después sembrarla, el hijo después tiene conocimiento por el aviso que le dieron de que habían encontrado a su padre sin vida”, dijo Luis Javier Tovar Gil, jefe de zona del Ministerio Público.
Al parecer cuando quemaba las hierbas secas, la cantidad de humo hizo que el hombre se intoxicara y, luego de perder el conocimiento, fue alcanzado por el fuego resultando con quemaduras hasta que murió.
Poco después fue encontrado tirado en el lugar por los habitantes de la zona, los cuales dieron aviso a las autoridades. Después de realizar los peritajes, el cuerpo fuera levantado para su autopsia de ley.
Lo hallan calcinado
El hombre fue a quemar el rastrojo de sus tierras para cultivarlas; no volvió.