Ayer se cumplieron tres meses de la desaparición de la piedadense María Dolores González Ramírez y a la fecha autoridades no han hecho reporte alguno, afimó su padre Ramón G. Estrada.
Desde el 28 de diciembre del 2014 no saben nada de la joven quien iba a bordo de una Jeep Liberty negra y vestía pantalón de mezclilla azul y blusa blanca a rayas.
Ante la incertidumbre, la familia González pide el apoyo de la ciudadanía y principalmente del Ministerio Público donde se levanto la primera denuncia.
Los meses pasan y no hay rastro de la joven; sus padres han revisado y empacado algunas de las pertenencias que la joven tenía, en el domicilio del fraccionamiento Villas de las Lomas, con la esperanza de encontrar una pista que los pudiera llevar al paradero de su hija.

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