Hasta hace algunos años, decir Porsche nada tenía que ver con vehículos híbridos, pero ahora el superdeportivo de la marca, el 918, es precisamente un vehículo híbrido. En cuanto al uso de la marca en un deportivo-utilitario, hace tiempo le perdonamos la aberración a la marca, e incluso ha llegado a gustarnos el concepto de la Cayenne y ahora mucho más con la Macan.
La versión híbrida de la Cayenne es quizá la más destacada de la gama. No es la que mejor desempeño tiene, ese privilegio es para las versiones GTS y las turbo. Pero con el nuevo modelo Cayenne S e-Hybrid, la marca ofrece un alto desempeño que depende menos de dinosaurios muertos que las demás versiones.
No todos los cambios en esta versión son positivos. Uno de los cambios es el uso abundante del verde fosforescente o “acid green”, como el equipo de mercadotecnia de la marca quiere que se le conozca. Quizá en algunos elementos como las mordazas en los frenos el resultado es agradable, pero hay algunos elementos plásticos en donde realmente no luce tan de alta calidad; incluyendo las agujas en el panel de instrumentos.
Pero quizá la queja mayor de la Cayenne híbrida sea en su espacio de carga. El espacio para la rueda de refacción fue seguramente aprovechado por los ingenieros para el sistema híbrido y esto dejó a la llanta de refacción en el área de carga. No solo quita un gran espacio, sino que deja sin la posibilidad de poner la cubierta, por lo que cualquier cosa que se coloque ahí quedará a la vista.
A su favor, la Cayenne híbrida tiene su desempeño. Sigue siendo un modelo Porsche; es rápida en su aceleración, el motor de combustión entra en acción rápidamente cuando se le exige y se mueve rápido.
Una cifra de 5.9 segundos de 0 a 100 km/h es bastante respetable para su segmento y más en un vehículo que la marca asegura puede lograr un rendimiento combinado de casi 30 kilómetros por litro.
La Cayenne es un modelo plug-in, por lo que es posible recargar su batería utilizando la red doméstica. Se conecta en uno de los costados y el conector está oculto en una tapa como si fuera la de combustible. Es un trabajo adicional para el conductor al llegar a casa u oficina, pero el rendimiento bien pudiera justificarlo.
La nueva Cayenne es una opción interesante para quien quiere sentirse ambientalmente consciente. Evidentemente hay otras formas de transporte que requieren aún menos combustible, pero no muchos deportivo-utilitarios y no de marcas tan divertidas como Porsche.

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