“Truena” marcas

Adrián González insiste que no es un jonronero, por más que su reciente despliegue de poder indique lo contrario.
Todo es cuestión de hacer buen contacto con la bola para el primera base de 32 años, obsesionado del estudio del bateo.
Y le está rindiendo dividendos, con tres jonrones el miércoles que convirtieron al mexicano en el primer jugador en la historia de las Grandes Ligas que dispara cinco en los primeros tres juegos. Apuntalados con esos jonrones, los Dodgers de Los Ángeles vencieron 7-4 a los Padres de San Diego para ganar 2-1 la primera serie de la campaña.
“Hazañas de este tipo siempre son satisfactorias”, dijo González, quien recibió su Bate de Plata de la temporada pasada antes del juego. Acto seguido, salió y conectó cuatro hits, tras dos partidos consecutivos de tres hits el lunes y el martes, convirtiéndose en el primer jugador de la Liga Nacional que lo consigue desde que Orlando Cepeda, de San Francisco, tuvo tres juegos de tres hits seguidos en 1963.
“Cuando estás encendido, te sientes bien. Buscas estirar la racha lo más que se puede, bateando lo más fuerte”, dijo el manager de los Dodgers Don Mattingly, una máquina de bateo en sus tiempos como jugador de los Yanquis.
González conectó jonrones en cuatro turnos al bate seguidos a partir del martes, antes de impulsar una en el sexto. Sus cinco jonrones en los primeros tres juegos hicieron historia en las mayores, según información proporcionada a los Dodgers por el Elias Sports Bureau.
En el juego del miétcoles, el “Titán” González la sacó en el primero y abrió el tercero con otro jonrón, aumentando a 5-2 la ventaja de los Dodgers. Abrió el quinto con su tercer cuadrangular —todos contra Andrew Cashner — y debió salir de la cueva para saludar a la afición.
“No se puede estar más prendido”, dijo el abridor de los Dodgers Brandon McCarthy. “Es una pesadilla para los pitchers. Es un veterano y se sabe de memoria su rutina. Sus turnos destilan mucha disciplina. Es muy difícil poder engañarlo”.