La Ley Seca establecida para este día de jornada electoral, dejará graves pérdidas económicas, por lo menos disminuirán las ventas un 40% de lo que se vende en un día normal.
Los negocios que están afiliados a la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac), prevé pérdidas de hasta 30 millones de pesos en Guanajuato, pero en general todos los negocios prevén que no venderán lo mismo, pues hay familias y grupos de personas que se abastecieron de bebidas desde antes que iniciara la veda.
“Yo vendo mariscos y aquí el domingo es un día fuerte, se les vende una cerveza o dos, no consumen al grado que se alcoholicen, sólo es para acompañar la comida, y con esto de la Ley Seca, pues sí nos afectan porque nosotros prevemos este ingreso y al menos mañana no vienen ni a comer, por eso creo que sí nos la veremos gruesa”, dijo Horacio Villegas.
Este domingo, además de la jornada electoral está programado a las 2 de la tarde el partido de fútbol entre la Selección mexicana y Brasil.
Y la Ley Seca inició ayer a las siete de la noche hasta la apertura de los establecimientos con permiso para la venta de alcohol pero de mañana lunes.
La Dirección de Fiscalización promovió que establecimientos comerciales y de servicios que expenden bebidas alcohólicas en botella cerrada, así como giros de venta de alimentos, cantinas, pulquerías y cervecerías tengan cierre parcial desde el sábado 6 de junio a las 7 de la noche hasta el lunes.
Carmen Moreno, gerente de la Canirac Celaya, dijo que las pérdidas por las horas de prohibición afectarán a los restauranteros.
“Hoy en día el 40% de la venta de restaurantes es el sábado, y en el caso del domingo todos los restaurantes abrimos y nos pega al 100%; el 60% de las ventas de la semana se reflejan en el fin de semana”, aseguró.
Las multas para los establecimientos que no cumplan con la ley, dependerán de sus antecedentes, es decir, el número de reincidencias que tenga, sin importar si cumple puntualmente con el pago de su multa, en cuanto a las sanciones estas irán desde 25 salarios mínimos hasta 250, esto por la nueva reforma de la ley de alcoholes.
Debido a que la venta de alcohol es más común en las comunidades, la Dirección de Fiscalización señaló que será en éstas donde se realicen operativos para vigilar que se respete la ley.