Da puntadas a la vida

La Sastrería Rodríguez con 82 años de tradición en el Centro de la ciudad, terminará su dinastía en las manos creativas de don Rogelio Rodríguez, quien heredó no sólo el local y el espacio, sino el amor por las puntadas de la vida, de lo que su padre le enseñó.
Llega el cubano
Don Juan Rodríguez es quien inicio la Sastrería en 1933, según Rogelio, le llegó a contar su señor padre que se utilizaba un sistema muy distinto, cuando llegó a la región un sastre cubano, que tenía su sastrería en León, quien apenas lo vio, le dijo que su método era muy rústico, entonces le preguntó que si quería aprender los métodos de corte para convertirse en un sastre completo.
Fue así que ante el conocimiento compartido, Juan Rodríguez se convirtió en sastre. Y así abrió la Sastrería Rodríguez que antes tenía su letrero en el exterior suficientemente grande, pero ahora con tantos cambios en la zona peatonal, y que se han reducido los espacios, ya es más chico, pero eso no ha afectado la clientela, pues está bien ubicado tras permanecer 82 años en el mismo lugar.
Esta sastrería localizada a unos metros de Presidencia Municipal y apenas frente a la Parroquia San Francisco de Asís, es donde se enseñaron también a coser un sin número de personas de la localidad, comentó Rogelio Rodríguez, que incluso la mayoría de los sastres de San Francisco fueron discípulos de su papá, quien enseñó a quien lo solicitó, así como al propio Rogelio y sus hermanos.
La más antigua
La Sastrería Rodríguez es la más antigua y de más renombre en la ciudad, no todos los hermanos Rodríguez siguieron los pasos del papá, como Mauro, quien estudió y trabajó en su carrera, sólo Guadalupe y Rogelio continuaron en el oficio de coser como sastres.
“Fuimos los que seguimos los pasos de mi señor padre”, comentó el sastre Rogelio Rodríguez que con cincuenta años de profesión, sigue siendo sastre dedicado, tiene un hijo que le ayuda en algunas reparaciones, pero él no es sastre completo, así que con él termina la dinastía de Sastrería Rodríguez.
Algunos de los famosos a quienes llegó a confeccionarle trajes fueron los notarios Wintilo Vega Salazar, Adalberto Ortiz Cervantes, ex Obispos, así como más personajes de León que venían a buscarle.