Deshacerse de la grasa, aumentarse los glúteos o senos, definir su cintura, desaparecer las chaparreras o quitarse las arrugas, son las cirugías más comunes a las que se recurre, sin embargo, cada vez hay más clínicas “patito” que ofrecen las operaciones a bajo costo, pero un alto riesgo.
Se pueden encontrar clínicas donde se cobra hasta 15 ó 20 mil pesos, mientras que con un cirujano certificado el costo es de alrededor de 50 mil pesos –aunque, todas las operaciones tienen costo diferente-.
La Secretaría de Salud ha identificando anomalías en 228 clínicas y ha cerrado 162 de ellas.
Sin embargo, se hace el exhorto para que no se recurra a éstas, pues aunque el costo es menor puede causarle hasta la muerte.
La Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) reportó que se han intensificado las acciones para realizar cierres de consultorios y clínicas irregulares de cirugía plástica.
Y por ello, se actualizó el listado de las clínicas “patito” que han sido sancionadas por operar en la ilegalidad y poner en riesgo la salud humana, la cual puede consultarse en la página www.cofepris.gob.mx/alertas
Al cierre de junio pasado, los verificadores sanitarios federales y estatales han inspeccionado un total de 1 mil 551 clínicas con prestación de servicios de cirugía estética, identificando anomalías en 228 y cerraron 162.
En dos años y siete meses se han cerrado 162 clínicas en el Estado, mientras que en la administración pasada fueron 4.
Está legislado desde el primero de septiembre del 2011, que el único que puede hacer cambios de contorno corporal, aplicación de inyecciones, de botox o rellenos es el cirujano plástico.
En el caso de que haya personas que quieran proceder contra algún “charlatan”, los miembros del Colegio de Cirujanos pueden ayudarlos, pero para ello es necesaria una denuncia formal.
La Secretaría de Salud de Guanajuato recomienda que antes de someterse a un tratamiento o cirugía estética se aseguren de identificar los siguientes puntos:
Que el establecimiento cuente con licencia sanitaria, que el médico que realice los procedimientos tenga cédula de especialidad en cirugía plástica y certificación vigente; que el título profesional del médico cirujano se encuentre a la vista del público.
Que se cuente con un área quirúrgica separada y sin posibilidad de contaminación y acceso restringido; que el servicio de cirugía cuente con áreas delimitadas; que cuente con un equipo especial para dar anestesia a los pacientes, operado por un anestesiólogo titulado y con especialidad en la materia, se deberá contar con un área de recuperación post-cirugía.
Los medicamentos deberán presentar registro sanitario, las etiquetas en español, no deberán estar caducos ni deberán suministrarse de manera fraccionada.
Aumentan clínicas “patito”
Deshacerse de la grasa, aumentarse los glúteos o senos, definir su cintura, desaparecer las chaparreras o quitarse las arrugas, son las cirugías más c