De acuerdo con el sexto reporte legislativo de Integralia Consultores, las Cámaras del Congreso de la Unión, gastaron durante los tres años de la 62 Legislatura, 6 mil 500 millones de pesos, en subvenciones. 
El informe resalta que pese a que los legisladores fueron los responsables de construir y avalar las leyes en materia de transparencia, los recursos (subvenciones) que reciben los grupos parlamentarios “son islas de opacidad”. 
De acuerdo con el director general de Integralia, Luis Carlos Ugalde, es necesario que se transparente el uso y destino de las subvenciones, toda vez que ayer domingo venció el plazo para transparentar los recursos que se gastan en el Congreso de la Unión.
“Cumplir con la disposición que establece la Ley General de Transparencia, que estipula que a más tardar el 30 de agosto, cada Cámara del Congreso, debió aprobar un programa de organización administrativa de los grupos parlamentarios”, afirmó. 
En conferencia de prensa, el ex presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), comentó que es importante que se reduzcan el monto de las subvenciones, así como el número de comisiones ordinarias y especiales en al menos 50%. 
Por su parte, el coordinador parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI), César Camacho, señaló que no se puede pensar en desaparecer las subvenciones, debido a que se podría debilitar el Poder Legislativo, lo que no significa que no se puedan revisar y auditar. 
En tanto, el líder de los diputados del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, indicó que su fracción ha decidido transparentar todos los recursos de la bancada albiazul, apoyados de organizaciones civiles. 
A su vez, el vicecoordinador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Guadalupe Acosta, adelantó que a finales de septiembre, la página del grupo parlamentario será transparente, a fin de que los ciudadanos conozcan en tiempo real los recursos utilizados y gastados por los diputados perredistas. 
Los diputados de las tres principales fuerzas políticas, se comprometieron a revisar y debatir las partidas parlamentarias, las prestaciones a las que son acreedores y el número de comisiones, en corto plazo. 

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