Las televisiones análogas o viejitas, esas de perilla y gran cinescopio, que son abandonadas en la calle o tiradas a la basura al terminar su vida útil, en realidad se vuelven un gran contaminante de nuestro medio ambiente, ya que desde su fabricación contienen químicos peligrosos como el plomo.
Manuel Moreno, de 47 años, con domicilio en el Centro de la ciudad, comentó: “En la casa hubo un momento en que llegamos a tener cinco televisiones de las viejitas, y poco a poco las cambiamos por pantallas, las otras las fuimos tirando a la basura”.
AM Express le preguntó ¿sabía que tirar esas televisiones viejitas a la basura contaminan porque contienen químicos?, y su respuesta fue que la realidad es que no se conocía este hecho, como tampoco llegó a conocer que en las direcciones de Ecología de los municipios se realizan campañas de colecta de aparatos electrónicos para evitar contaminar.
Y consideró conveniente, para que más población lo llegue a conocer, que hace falta una campaña para enterarnos dónde podemos llevar estos aparatos para no contaminar, ya que mucha gente si se le descompone su aparato ya no lo manda componer como antes, mejor compran una pantalla de las nuevas.
Estos aparatos están siendo desechados sin control, ya que con el apagón analógico se calcula que se podrían desechar millones de televisiones viejitas que contaminarían desde nuestros cultivos y el agua que bebemos.

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