Los indicios de un incremento de la presencia militar rusa en Siria preocupan a Estados Unidos y plantean la interrogante de si Moscú tiene planeado intervenir en el conflicto.
El presidente Vladimir Putin ha mantenido una postura reservada sobre el tema y afirma que Rusia sopesa diversas opciones, declaración que ha avivado sospechas sobre las intenciones del Kremlin.
Los observadores en Moscú afirman que las maniobras rusas podrían ser parte de un plan para el envío de soldados a Siria a combatir al grupo Estado Islámico con esperanzas de enmendar los fracturados vínculos de Moscú con Occidente.
Sin embargo, advierten que Putin tendría remotas posibilidades de superar el escepticismo de Estados Unidos para convencerlo de su plan y existe el peligro de repercusiones catastróficas si opta por una acción militar unilateral en Siria.
Al barajar la posibilidad de sumarse a la coalición contra el grupo Estado Islámico, Putin podría confiar en obtener algunas cuantas concesiones cruciales. Su principal objetivo: el levantamiento de las sanciones occidentales y la normalización de las relaciones con Estados Unidos y la Unión Europea, que se encuentran en su punto más bajo desde la Guerra Fría por la crisis ucraniana.
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, dejó entrever la preocupación de Washington en una conversación telefónica con su homólogo ruso Sergey Lavrov durante el fin de semana.
El Departamento de Estado dijo que Kerry dejó claro que si son correctas las versiones de un inminente incremento de la presencia militar siria, “estas acciones podrían intensificar aún más el conflicto, causar más pérdidas de vidas inocentes, aumentar la oleada de refugiados y elevar el riesgo de un enfrentamiento con la coalición que combate al grupo Estado Islámico en Siria”.
De acuerdo con un funcionario de Defensa de Estados Unidos que solicitó el anonimato porque no estaba autorizado a hacer declaraciones sobre temas delicados, Washington ha detectado un aumento en el número de aviones de transporte rusos que buscan autorización diplomática para vuelos con destino a Siria.
Dijo que se desconoce el tipo y el propósito de la carga de los aviones.
El portavoz del ministerio griego del Exterior, Constantinos Koutras, dijo que Estados Unidos solicitó a Grecia que cancele las autorizaciones de vuelo por espacio aéreo nacional concedidas del 1 al 24 de septiembre para aviones rusos con dirección a Siria. Grecia dijo que examina la solicitud.
Sergei Karaganov, fundador del Consejo sobre Política Exterior y Defensa, una prominente asociación de expertos políticos rusos, dijo que Rusia consideraba la posibilidad de sumarse a la coalición contra el grupo Estado Islámico, pero Occidente se ha mostrado hostil a la fecha.
“Son renuentes a aceptar propuestas de Putin, a quien quieren contener”, apuntó.
Igor Korotchenko, coronel retirado del estado mayor de las fuerzas armadas rusas y ahora editor de la revista Defensa Nacional, también dijo que aunque Rusia ha suministrado armas al gobierno de Assad, no tiene intención de enviar efectivos a Siria.
“Rusia no enviará soldados al Oriente Medio, eso está absolutamente excluido”, afirmó. “Ese es un problema de Estados Unidos. Rusia no pagará por ello con vidas de sus soldados”.