Centenas de conductores enloquecieron ayer cuando intentaban entrar o salir de Celaya por la salida a Querétaro, esto debido a que un grupo de inconformes con la tarjeta de prepago SIBE realizaron cierres parciales a la circulación.
Los inconformes llegaron desde las 6 de la mañana frente a la Glorieta de los Fundadores, en el bulevar Adolfo López Mateos casi al comienzo de la carretera a Querétaro, desde esa hora estuvieron manifestándose y parando camiones impidiéndoles trabajar.
En un inicio se manifestaron tranquilamente, eran cerca de 10 personas que portaban cartulinas donde expresaban su oposición al aumento en la tarifa del pasaje. Sólo estaban parados pidiendo el respaldo de la ciudadanía.
“No al abuso, no a las tarjetas”, “Toca el claxon si estás con nosotros”, decían las pancartas.
Pero conforme pasaron las horas y ante la falta de información sobre el avance en las reuniones entre sus líderes y las autoridades, perdieron la calma y comenzaron a abrir y cerrar el paso vehicular.
Ya para las 2 de la tarde, que es la hora en que muchos salen de la escuela y sus trabajos, los manifestantes también se cansaron de esperar y comenzaron a cerrar la circulación.
Primero cerraron un carril en cada cuerpo vehicular del Bulevar, quedando tres para que los coches circularan, pero luego se calentaron sus ánimos y comenzaron a cerrar el resto de los cuerpos vehiculares.
Diez minutos cerraban toda la vialidad y 10 la volvían abrir, sin embargo había conductores sumamente molestos con el cierre a los que no les importó y les echaban encima sus coches, los insultaban y gritaban que “mejor se pusieran a trabajar en lugar de afectar a miles de personas”.
Hubo un momento en que los manifestantes sintieron el enojo de los conductores y se tomaron todos de las manos para que ningún coche pasara, mientras se escuchaban las bocinas en señal de enojo y reprobación por parte de los conductores.
Ese enojo los hizo desistir del cierre total y durante todo el día de la carretera.
Y es que mientras que unos de los manifestantes querían cerrar por completo la vialidad, otros decían que así menos lograrían la empatía y solidaridad de los ciudadanos.
“Pónte en su lugar, es la mera hora de la salida, si tú fueras saliendo de trabajar o vienes de traer tus niños de la escuela y ya tienes hambre y se te atraviesa alguien y no te deja pasar, pues también tú les mentabas la madre, en la mañana que estábamos pacíficamente la gente nos apoyaba, ahorita sólo nos están insultando y hasta un accidente puede pasar”, dijo Leonardo Ramos al resto de los manifestantes.
Fueron más de 10 horas las que se manifestaron en esta salida, de las cuales una hora fue de cierres parciales.
Aunque tranquilos con los ciudadanos, con los choferes de los microbuses sí estaban agresivos; en este punto pararon unos 10 camiones, obligaban al conductor o bien a encerrar su vehículo o a llevarlos a algún punto de la ciudad, mientras que en la base de los Saetas, que está a una cuadra de este punto de manifestación, mantenían secuestrados 80 camiones y a los choferes sin dejarlos sacar sus vehículos.
Y protestan en Presidencia
Aunque los bloqueos no se dieron como se había advertido, en los cuatro accesos de la ciudad y vialidades principales, algunos grupos de personas siguieron protestando en contra del sistema de prepago en el transporte público.
En esta ocasión los inconformes sólo se manifestaron en la Presidencia, y la única diferencia con respecto a días pasados, es que en esta ocasión cerraron las puertas del recinto impidiendo el ingreso de cualquier persona.
Además ahora exigían la liberación de las personas que fueron detenidas en los sucesos del martes.
Paran dos micros y bajan a pasajeros en el Jardín
Manifestantes bloquearon la circulación con dos microbuses en pleno Jardín Principal de Celaya y en la Calzada Independencia.
Unas 80 personas inconformes colocaron cerca de 20 cartulinas sobre el acceso, en la rampa para discapacitados y en los pilares de la Presidencia, en ellas se leía su desacuerdo con el aumento del pasaje y el apoyo a Adrián Guerrero, líder sindical detenido en San Juan de la Vega.
Desde el mediodía hasta las 4 de la tarde se mantuvieron al margen en el jardín principal, hasta que tomaron un camión de la empresa Atucsa, ruta Latino – Silva, número económico MCE-0060, el cual detuvieron en la esquina de Morelos y Allende.
Luego impidieron el paso de un camión de la empresa Verdes de Guanajuato, ruta Gobernadores – Olivos, número económico MCE-0477, el cual quedó detenido en la Calzada a la altura de Morelos. Aproximadamente unas 15 personas, entre niños, mujeres y hombres, decidieron que no se iba a bajar de la unidad, la cual pretendían trasladar al jardín para continuar con los bloqueos en el primer cuadro.
Los pasajeros, quienes dijeron que no estaban contra su voluntad, señalaron que estaban violentando sus garantías al no dejarlos circular y que no se iban a bajar porque ellos tenían el libre paso, además de que no estaban dispuestos a pagar de nueva cuenta.
Fue hasta las 7:30 de la noche que los pasajeros se pusieron de acuerdo y decidieron bajarse de la unidad, lo que provocó júbilo entre los manifestantes que al grito de: “sí se pudo, sí se pudo”, causaron la molestia de los que se bajaban de camión.
Una hora más tarde los inconformes se retiraron y la circulación volvió a la normalidad.
‘Encierran’ a Atucsa
Cerca de 45 choferes de Atucsa no lograron hacer a su ruta, debido a que inconformes con el sistema de prepago les impidieron la salida de la base; ellos sólo piden que se les permita trabajar.
Francisco Rodríguez, quien se desempeña como encargado de ruta en la línea de Atucsa explicó que cerca de 45 operadores con sus respectivas unidades no consiguieron salir a ruta de la base ubicada frente a la Universidad Latina, pues inconformes con el sistema de prepago lo impiden.
“Nadie decidimos suspender el trabajo, nos están deteniendo y para evitar que agredan a uno (de los choferes) mejor se meten”, dijo.
Según Francisco, algunas unidades de Pinos y Latino-Silva sí trabajaron, pero limitados a pequeños tramos de ruta.
Agregó que algunos operadores y unidades han sido agredidos en los últimos días por los manifestantes.
Dijo que como operadores no están ni a favor ni en contra del sistema de prepago, “nosotros no tenemos nada qué decir, nosotros sólo queremos trabajar”, exclamó.
“Si el Municipio decide seguir con lo que lleva ahorita, de no regresar a la tarifa anterior, nosotros tenemos que acatar, si nos dicen: salgan a 6 y 3 pesos o salgan gratis, nosotros salimos”, abundó.
AM fue testigo de cómo un camión de Atucsa llegó a la altura de la glorieta, sobre Constituyentes y los manifestantes se subieron para llevar el camión de regreso a la base.
Gustavo Patiño, uno de los manifestantes que impedían la salida de las unidades, recalcó que la protesta no es en contra de los operadores, sino de los cobros excesivos que se han generado con la implementación del prepago.
Se organizan para trasladarse
El caos ocasionado por el secuestro de decenas de camiones de transporte público, generó que personas que ni se conocen se hayan juntado para pagar taxi y hasta para pedir ‘aventón’.
En las diferentes paradas de microbuses varias personas cansadas de esperar sus camiones, se preguntaban entre sí a dónde se dirigían y se ponían de acuerdo para abordar un taxi y pagar entre varios.
Por ejemplo, en el cruce de Tecnológico y el Eje Clouthier, se juntaron cuatro personas que querían abordar un camión de la ruta Pinos y así llegar a la salida a Apaseo para ahí trasbordar, pero al darse cuenta de que ya habían sido secuestrados todos los camiones de Atucsa y que son los que llevan ese destino, mejor abordaron un taxi entre todos.
“Nos cobró 50 pesos, hasta eso que no se pasó el taxista, nos tocó casi de 13 pesos por persona, pues sí fue poquito más que el camión, pero qué hacemos, lo bueno es que nos estamos organizando ante esta contingencia, que yo diría es una catástrofe, es un desorden esta ciudad”, dijo Francisco Medina.
También José Morales y Laura Patlán se organizaron y pagaron un taxi desde Pinos hasta el Bulevar, a ellos también les cobraron 50 pesos.
“Yo voy a Jardines y el señor va a al Bulevar casi llegando a la salida a Querétaro, así sin conocernos, nos pusimos de acuerdo y pagamos el taxi entre los dos, no hay otra, si no cómo nos vamos”, dijo Laura.
Hubo hasta quienes sin pena pidieron ‘aventón’ en las paradas de los microbuses, pues no había taxis o no traían dinero para pagar.
“Pues yo estaba esperando el camión para irme a mi casa, voy saliendo de la escuela pero dicen que ya secuestraron a los micros verdes y mi mamá me dio sólo para el camión, yo sí voy a pedir a ver si alguien va para mi rumbo, está lejos y pues si me voy caminando voy a llegar en casi dos horas”, dijo Martín, un joven de 17 años.
Hasta hubo quienes en las redes sociales publicaban la ruta por la que se transportan en su automóvil particular y ofrecían pasar por quienes vivieran o estuvieran cerca.
Y es que ayer continuaron los bloqueos; inconformes frenaban algunos microbuses y obligaban a los pasajeros a bajarse, y por otro lado no permitieron la operación de la ruta Pinos – Gobernadores, de la empresa Atucsa, una de las más importantes.