La compañía de desarrollo tecnológico Pegasus Global Holdings está construyendo una ‘ciudad fantasma’ en pleno desierto del Nuevo México (Estados Unidos). Este lugar costará 1.000 millones de dólares y podría albergar a 35.000 habitantes. Sin embargo, nadie vivirá allí.
El Centro de Innovación, Pruebas y Evaluación (CITE, por sus siglas en inglés) albergará un centro de nuevas tecnologías y nunca estará habitada, a pesar de que cuenta con todas las infraestructuras necesarias: viviendas, centros comerciales, una base industrial, una iglesia, una autopista y un aeropuerto de 38 kilómetros cuadrados.
De acuerdo con el diario ‘Daily Mail’, la ciudad será un ‘laboratorio al aire libre’, en donde la empresa probará nuevas tecnologías vinculadas con el urbanismo, desde sistemas de ahorro de energía, de seguridad y de transporte inteligente hasta redes de comunicación de última generación y plantas de desalinización de agua y reciclado de residuos.