Los comercios de la Explanada del Mercado lucen llenos de colores con la tradición de la venta de alfeñiques.
Los hay de todos colores y formas existentes, y siguen siendo parte de la cultura de cientos de personas que acuden a comprar su “muertito” al Mercado.
Imaginación y color
Esta tradición llenó la mayor parte de los negocios que se encuentran ubicados en la Plaza, decenas de puestos que buscan vender el tradicional dulce mexicano con la gran variedad de figuras que toma este dulce.
La imaginación y los colores son el principal condimento de esta tradición que con solo una prueba del delicioso sabor de azúcar glas y limón hace que cualquiera guste de comprarse y saborear su muertito.
Hay gran variedad de diseños que hace que chicos y grandes se detengan a comprar cualquiera de las formas que van desde un pan en miniatura, calaveritas de chocolate, calacas con diferentes oficios, animales como puerquitos, vacas, pollos y gallinas incluso hay quienes prefieren comprar su calaverita vestida de equipos de futbol.
De acuerdo a los más de 50 vendedores de este delicioso arte, todas las figuras son únicas pues se hacen artesanalmente pieza por pieza lo que hace que los compradores vayan buscando puesto por puesto hasta encontrar el de su preferencia.
10 mil pesos en inversión
Para los comerciantes de la zona de la Explanada que durante la temporada del mes de noviembre invierten hasta 10 mil pesos en mercancía, indicaron que más que un negocio este trabajo se ha vuelto parte de su tradición, ya que siguen fomentando en los más jóvenes comprar sus “muertitos”.
Los precios van desde los 2 hasta los 80 pesos, sin embargo para quienes compran esta golosina tradicional es una experiencia que sigue siendo digna de festejarse año con año.

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