La niña Andrea Larios Terres, de 10 años de edad, falleció el pasado miércoles tras su entrenamiento de clavados en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos y Alto Rendimiento (CNAR), dependiente de la Conade.
La menor murió a las 19:50 horas de ese día por un paro cardiaco en el Hospital Zaragoza del ISSSTE, al que fue trasladada desde el complejo, de acuerdo con el reporte de las autoridades.
Conforme al expediente CI-IZP/IZP-6/UI-1S/D/1864/10-2015, la pequeña fue atendida en primera instancia por Berenice Ambriz, una de las doctoras del CNAR que se encontraba en esos momentos en el complejo, al presentar mareos y desorientación tras salir de la fosa de clavados luego de ejecutar un salto desde el trampolín de tres metros.
De acuerdo con la indagatoria, Ambriz detectó pulso débil y poco después la niña se desmayó dando paso a trabajos de reanimación que resultaron infructuosos. Por tal motivo fue trasladada al nosocomio antes citado al que ingresó a las 19:37 horas.
El CNAR brinda atención a niños y jóvenes a los que divide en tres categorías: Matriculados (que viven en el complejo), Externos (que estudian y entrenan pero no duermen ahí), y Usuarios (sólo entrenan), y la pequeña fallecida estaba en este último rubro.
La menor era entrenada por Jorge Carreón, quien ha sido guía de clavadistas que han llegado a Juegos Olímpicos, como Carolina Mendoza, seleccionada para Londres 2012.
CANCHA buscó al titular de la Conade, Alfredo Castillo, para preguntarle del caso, pero su responsable de Comunicación Social, Emiliano Montiel, informó que “por la tarde” se haría el pronunciamiento oficial a través de una tarjeta informativa, misma que nunca llegó.
Montiel afirmó que desde el primer momento se le otorgaron todos los apoyos y facilidades a la familia de la menor y evitó proporcionar más detalles del caso “porque la Procuraduría General de Justicia del DF ya está realizando las pesquisas”.

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