Miles de personas acudieron a los panteones de la ciudad para llevar flores y ofrendas a sus familiares.
Francorrinconenses se reunieron ayer en los panteones de la ciudad para visitar a sus difuntos.
Las tumbas estuvieron adornadas con flores de colores, cervezas, comida y todo lo que les gustaba en vida a los difuntos.
Seguridad Pública y Protección Civil fueron las dependencias encargadas de supervisar que todo estuviera en orden.
“Este año me gustó la organización porque hay más seguridad y aparte hay más espacio, y no han dejado a entrar a jóvenes drogados que otros años hacían desorden; no sólo hay que visitar el día de hoy sino siempre y no dejarlos abandonados, hoy es especial y ahí se demuestra lo que podemos devolverles ahora que están aquí en el panteón”, comentó María del Socorro.
Hubo familias que llevaron conjunto norteño, banda y hasta mariachi para que les tocaran las canciones que les gustaban a los difuntos.
Había niños se dedicaron a ayudar las personas con el agua o pintando de color dorado las letras que ya estaban desgastadas en las lápidas y así ganarse unos pesos.
Las calles que estaban alrededor de los dos panteones de San Francisco, estuvieron repletas de comerciantes, en su mayoría vendedores de flores.
Las familias enteras se dispusieron a dedicar un rato de su tiempo para ir a limpiar las tumbas, arreglarlas y al final rezar un rosario dedicado a los familiares que ahí descansan.
Al terminar de convivir con sus difuntos, las familias se persignaron, recogieron sus cosas y se despidieron de sus familiares fallecidos y les prometieron volver el próximo año.
De esta manera fue como las familias francorrinconenses se reunieron en los panteones municipales a festejar el Día de Muertos.
Se llenaron los panteones
Adornaron tumbas con lo que le gustaba en vida al difunto, hasta música les llevaron.