Los Reales de Kansas City, flamantes campeones de la Serie Mundial, fueron vitoreados el martes por miles de fanáticos jubilosos, durante un desfile que paralizó durante horas el centro de esta ciudad.
Tras un recorrido triunfal de más de 3,5 kilómetros en los compartimientos de carga de distintas camionetas, el dueño del equipo David Glass, el piloto Ned Yost y varios integrantes de los Reales, subieron a un estrado, desde donde agradecieron el aprecio de los seguidores, y les dijeron que no habría sido posible conquistar el título sin tanto apoyo.
Johnny Gomes, adquirido a media temporada a los Bravos de Atlanta, no figuró en el roster durante los plyoffs. Sin embargo, se le reconoce por aportar su alegría en los vestuarios.
El pelotero pidió un minuto de silencio en memoria del padre de Edinson Vólquez, del progenitor de Chris Young y de la madre de Mike Moustakas, quienes fallecieron este año. En el caso del padre de Vólquez, su deceso ocurrió justo en el día en que el dominicano abrió el primer juego de la Serie Mundial.
Vólquez se llevó un sonoro aplauso cuando prometió que los Reales volverán al mismo lugar el año próximo.
Numerosos seguidores agitaron banderas y gorras, emocionados por el segundo título de Serie Mundial en la historia del club. El anterior fue en 1985 y fue hasta 2014, cuando perdieron la Serie Mundial ante los Gigantes de San Francisco.
Ahora, todos esos sinsabores quedaron en el olvido.
Celebran a los Reales
Jugadores y entrenador agradecieron el aprecio de los seguidores, y les dijeron que no habría sido posible conquistar el título sin tanto apoyo.