En la parte alta de un acantilado de Jávea, en Alicante, España, el arquitecto Ramón Esteve le dará vida a una residencia que gozará de espectaculares vistas con dirección a la Cala Ambolo y a la Bahía de la Granadella. Su entorno será de gran valor paisajístico.
La propuesta contará con 700 metros cuadrados de construcción y estará formada por un volumen blanco quebrado que dirigirá las perspectivas de las diferentes estancias hacia el exterior para generar espacios impactantes.
“El acceso será por la parte más baja de la parcela, a través de una escalinata, de manera que la vivienda quedará en la parte más alta, apoyada sobre un basamento de piedra que la anclará al terreno” señaló el arquitecto Esteve.
El inmueble contará con dos fachadas, pero la principal tendrá una base de piedra que enmarcará los vidrios y jardines del área, además de que enaltecerá la altura y color del diseño.
Al ser un proyecto de estilo mediterráneo, la frescura y la luminosidad empaparán los ambientes por medio de amplios ventanales que potenciarán al máximo la entrada de luz natural.
“La iluminación estará integrada en la arquitectura y el mobiliario proyectado de manera que potencie la intencionalidad de sus formas quebradas”, dijo Esteve.
Un entorno verde
La otra fachada contará con vistas hacia el jardín de acceso, en donde predominarán los pinos, cítricos y olivos que ayudarán a complementar la vista de los dormitorios en el primer piso y que, además, estarán unidos por medio de un balcón corrido que recaerá sobre la alberca.
En el frente, una piscina infinity con vista hacia la Cala Ambolo seducirá el entorno, mientras que los ventanales enmarcarán la vista desde la parte interior.
Tanto los materiales como la gama cromática que se utilizará enriquecerán el estilo mediterráneo de la propuesta que presume el artífice español.
“El interiorismo ha sido diseñado íntegramente por mi estudio, pero la materialidad y la gama cromática empleada aportarán a la casa la frescura típica de una vivienda mediterránea”, destacó.
De acuerdo con Esteve, se evitarán los elementos estructurales innecesarios con el fin de liberar el espacio y resaltar las inigualables vistas.
El interior será un espacio continuo y fluido, donde se podrán obtener diferentes vistas independientemente de la ubicación de las zonas.
“Todo el mobiliario fijo ha sido diseñado para la casa, desde la isla de la cocina y los gabinetes hasta los armarios y los que van en los dormitorios y cuartos de baño”, añadió el arquitecto.