La zona arqueológica de Zaragoza en este municipio es considerada uno de los atractivos del territorio, sin embargo hoy en día este lugar se encuentra un tanto abandonado, ya que a pesar de su importancia, aún carece de proyección turística.
Se sabe que el sitio arqueológico fue descubierto a principios de los años setenta por habitantes de la comunidad de Zaragoza.
Un misterio
Diversas organizaciones y colectivos de estudiosos en la materia de arqueología han realizado estudios sobre el centro ceremonial, a pesar de ello no se ha revelado oficialmente qué cultura habitó ese espacio.
Sin embargo, dado a que predominan términos en lengua purépecha, se cree que los nativos de esta cultura -asentada en mayor parte en estado de Michoacán- pudieron habitar dicho terrenos.
El lugar suele ser denominado Cerro de los Chichimecas, pero la Organización Especial de Investigación La Piedad (OEI) ha indicado que debería ser Mesa de Acuitzio, que en purépecha significa: Mesa del lugar de la serpiente.
Características de la zona
De acuerdo con los hallazgos arqueológicos, que datan del 1800 al 200 antes de Cristo (a.C.) el área cuenta con 3 estructuras piramidales principales, baños ceremoniales, juego de pelota, diversos petrograbados, pirograbados o petroglifos (grabados en piedras) de animales de la región como serpientes, tortugas, caracoles y zopilotes.
Como en todas las culturas la astronomía también fue importante, destacan los grabados alusivos al sol, la luna y las constelaciones, aunque la hierba ha cubierto algunas de estas rocas, impidiendo su visión.
Los complejos de cultivo (terrazas), también fueron indispensables y una de las ventajas era la cercanía con el río Lerma y el reliz de rocas, que es como una enorme muralla que protege la zona.
Piezas rescatadas
Investigadores de OEI se han dedicado al estudio y rescate del patrimonio cultural, por ello el Museo resguarda vasijas de barro y figuras ahí encontradas.