El tigre de bengala que se escapó del complejo turístico Paraíso de los Manglares, ubicado a un costado del poblado El Embarcadero, en la laguna de Coyuca de Benítez, fue cazado a balazos por un ranchero del lugar.
El felino —especie en extinción— se había escapado el 26 de octubre pasado y, antes de ser privado de la vida, había matado a un perro y a dos vacas.
Gregorio Galeana, propietario del rancho, interpuso una demanda en contra de quienes resulten ser dueños del tigre de bengala, para que respondan por la muerte de las dos reses y el perro, a quienes el animal cazó para alimentarse.
La asociación ambientalista Pro defensa y Conservación de la Isla de La Roqueta, dedicada a la conservación de la flora y la fauna silvestre, lamentó la muerte del felino, un macho adulto, que según el vocero de esa organización, Alejandro Martínez Sidney, se debió a la mala administración del restaurante y la falta de supervisión de las autoridades competentes, como la Semarnat y la Profepa, a quienes demandó el cierre de la unidad ambientalista Paraíso de los Manglares.
Dijo que el felino puso en riesgo a los pobladores del lugar y que el ranchero que lo baleó lo hizo para proteger su vida, por lo que no le quedó otra alternativa que dispararle al felino.
Añadió que la unidad ambientalista Paraíso de los Manglares cuenta con un criadero de cocodrilos que se reproducen en la laguna de Coyuca de Benítez, que por falta de cuidado son un riesgo para los lugareños y los turistas que acuden a ese destino turístico.

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