La partida de los hijos puede ser motivo de depresión y soledad para la pareja, por eso psicólogas recomiendan establecer un plan de nido vacío para que ese momento se convierta en una oportunidad de vida.
Herminia Aguilar, maestra en psicología, recomienda pensar en darle un matiz diferente al trabajo que los haga sentir constructivos y productivos o, si no trabajan, plantearse la posibilidad de emprender un negocio o asociarse con alguien.
También echarse un clavado al interior para hacer lo que siempre quisieron pero fueron dejando a un lado porque los hijos demandaban la mayor parte del tiempo.
“Ahora sí, bienvenidas las clases de pintura o de baile”, explica.
El psicoterapeuta Amparo Miranda, agrega la posibilidad de pensar en retomar la carrera o estudiar una nueva, o bien, dedicar tiempo al voluntariado.
La partida de los hijos también implica un reencuentro con esa persona que hace muchos años escogimos para formar una familia.
El secreto, dicen las especialistas, es ubicarse en el presente, no sufrir por lo perdido sino mirar la nueva etapa como una aventura y concebir la independencia de los hijos como un logro.
Para Aguilar, por otro lado, el hecho de que los papás puedan reinventarse es una forma de seguir dándole el mejor ejemplo a sus hijos.
Y si la tristeza no cede, si se encierran y no hablan con nadie, si hacen el trabajo de manera automática o se encuentran desesperanzados, acudir con un psicoterapeuta es la clave para ver esta etapa con otros ojos.
Algunos consejos para cuando tus hijos se independicen:
– El miedo de que les pase algo malo sólo te atormenta, ofrece tu apoyo y olvida el temor.
– Céntrate en lo que viene y no en lo que perdiste.
– Establezcan un plan de comunicación viable para todos. Pueden fijar los días y horarios que convengan a la mayoría.
– Aclaren el sistema de apoyo. Fijen reglas claras; la independencia implica responsabilidades.
– Recurre a tus redes de apoyo, comparte tiempo con amigos o parejas que enfrenten una etapa similar.