Detienen venta de animales

A las 07:00 horas de hoy, los lugares donde suele comerciarse con animales en el Tianguis El Baratillo eran armados en silencio por sus locatarios.
“¿Hoy sí durmió, jefe?”, preguntó uno de ellos de forma amigable a uno de los policías cuya vigilancia en la Explanada del Mercado El Mirador se suma a la de otros 10 uniformados.
Las jaulas, peceras, correas, camas para mascota, comenzaban a poblar la explanada en el tianguis más grande del Estado, pero hasta el momento no se escuchaba un ladrido, maullido, o trino, sólo las cajas de mercancía arrastradas por el suelo, y apenas el sonido de los tubos metálicos donde se levantarían las lonas y se pondrían las mesas.
Los locales se erigen ante la mirada policíaca y bajo las lonas del Ayuntamiento donde agradecen por no vender ni comprar animales, pues son de locatarios permitidos (comercian con accesorios para mascotas), pero en una gasolinera cercana al menos tres vehículos de la Unidad de Protección Animal de Guadalajara esperan.
“Se trata de inhibir la venta de animales en vía pública, no hemos encontrado hasta ahorita ninguno, tal parece que los comerciantes están receptivos y está prohibida la venta, los comerciantes están permitiendo hacer algunas revisiones, no nos tardamos más que dos minutos y estamos dando facilidades”, mencionó Camilo González, inspector operativo de la Policía de Guadalajara.
Arroyo San Ramón es otro punto donde en episodios anteriores de este tianguis podían conseguirse animales incluso exóticos, y en algún momento se informó sobre las peleas de gallos realizadas en el lugar. Hoy luce vacío, y apenas un par de vendedores levanta parte de su local.
La semana pasada, el Ayuntamiento de Guadalajara realizó un operativo en estos lugares para inhibir la venta de animales, pues es una práctica prohibida por los reglamentos municipales. El miércoles, una mujer quien dijo llevar más de 20 años en el negocio increpó al alcalde Enrique Alfaro dentro de la Presidencia, y exigió su permanencia.
Un día después, el jueves, un grupo menor a los cien comerciantes se manifestó afuera del edificio con la misma inconformidad. Representados por quien se identificó como Arturo, amagaron con volver a colocarse hoy.
Cerca de las 07:30 horas, junto con el encendido de la primera bocina en la Explanada, en uno de los locales colocaron pancartas con diversas leyendas.
“Mis animales y mi familia necesitan comer y ya no tengo recursos porque el Gobierno de GDL no me deja trabajar”, “Los criaderos y granjas con permisos de Profepa, Semarnat, Sagarpa, y Conapesca son afectados”, se lee en ellas.
De acuerdo con la Policía Municipal, 120 de sus elementos vigilan todo el lugar para evitar la venta de animales.
El operativo por parte de la Policía tapatía inició a las 04:00 horas  y se dará por concluido a las 16:00 horas; la corporación dará un balance general de lo acontecido en el sitio.
La dirección de Protección Animal señaló que de momento ningún espécimen a sido recogido; el fin de semana pasado se protegieron seis perros que fueron abandonados y dos aves.