El portal de Yahoo informó que el tercer jueves de noviembre de cada año, se realiza el evento ‘Great American Smokeout’ organizado por la Sociedad Estadounidense del Cáncer, para alentar a la gente a que deje de fumar. Como ex fumadora que dejó el tabaco hace muchos años, te invito a conocer las fases por las que pasarás cuando enfrentes este reto.
Fase 1: De la decisión a la duda
Supongamos que has decidido dejar de fumar. Has arrojado el paquete a la basura, los encendedores, y te has prometido que este será el último adiós al tabaco. ¡Felicitaciones! Tu decisión es el primer paso.
Estás radiante y esperanzado. Por medio minuto. Luego, te preguntas, ¿Podré esta vez? ¿No seré demasiado joven/viejo para dejar? ¿Será un buen momento? Sin embargo, una convicción interna de que sí podrás, te hace pasar el día sin fumar.
Fase 2: El día después
Han pasado 24 horas desde que fumaste el último cigarrillo, y te sientes casi como un superhéroe. Tu primer respiro matutino puede estar un tanto “bloqueado”, pero en el segundo te das cuenta de cuánto aire te había faltado hasta el día anterior.
Tu cuerpo, agradecido, se ha despertado de un letargo, y se dispone a limpiar la “casa” de toxinas. Todavía tienes sentimientos encontrados (una mezcla de miedo y alegría), pero no te atreves a arruinarle ese día feliz a tu organismo. “Mañana, quizás. Hoy no”, te dices.
Fase 3: El tercer día
Puede que en este día empieces a sentir olores que habías olvidado. El de las telas, el de la tinta, o el de los platos cuando están calientes. Empiezas a sentir sabores que tenías completamente bloqueados. Te dices: “Esto me gusta”, y dejas pasar un día más.
Fase 4: El primer mes
Quizás hayas empezado a ejercitarte, ahora que necesitas una distracción y una descarga. Estás entusiasmado por lo bien que te ves: tu piel, tu cabello, la blancura de tus dientes, y lo espectacular que hueles. Si bien algunos momentos se te hacen difíciles, como al beber un café, salir con amigos, o en el break del trabajo, te sientes orgulloso de tu logro. “Ya un mes”, te dices, e inflas el pecho con muchísimo aire (ahora puedes hacerlo).
Atención: este es el momento en que tus amigos no fumadores te felicitarán, y los fumadores te harán preguntas algo extrañas, y hasta puede que te ofrezcan cigarrillos. ¡No te rindas!
Fase 5: Seis meses
El camino sigue un trecho más para llegar al año, pero desde aquí todo será más fácil. Algunas veces, hasta olvidas que fumabas. Te sientes mejor, has retomado actividades que el tabaco había anulado. Tienes más energía, mejor humor, autoestima, y como si todo eso fuera poco, has ahorrado muchísimo dinero. Has hecho algo maravilloso por ti: te has liberado. ¡Felicitaciones!