Brindar alternativas para solucionar problemas sociales, tratar asuntos de vital importancia como el medio ambiente, problemas climáticos, enfrentamientos bélicos y más, fue lo que se vivió en la segunda jornada Icwimun, organizada por el Instituto Celayense y el Instituto Sir Winston Churchill.
Esta jornada arrancó el viernes pasado con una ceremonia de inauguración, una exposición y las sesiones de los delegados. Fueron 12 las escuelas inscritas que se reunieron para representar el Modelo de las Naciones Unidas y adentrarse un poco en este complejo ambiente que guía a los dirigentes del mundo en busca de soluciones.
Este simulacro se realiza cada dos años con el motivo de preparar, concientizar y unir a los estudiantes de los niveles de sexto de primaria, los tres grados de secundaria y preparatoria, en un modelo representativo de la ONU. Así el alumnado, en sus papeles como delegados tienen la encomienda de defender la postura del país al que representan, debatiendo las diversas problemáticas como parte de un comité, donde exponen sus argumentos, dialogan, debaten y tratan de conciliar en asuntos internacionales, tal como lo hiciera la organización mundial.
Cinthya Leal, coordinadora del Centro de Idiomas de la Universidad Latina de México, de la mano de los directivos del Instituto Celayense y del Instituto Churchill, fueron los encargados de organizar este evento, reuniendo a más de 160 alumnos de distintas escuelas como la Primaria Bilingüe José Vasconcelos, la Escuela Francisco Paredes Velasco, el Colegio Nuevo Continente, la Escuela Justo Sierra, el Instituto Magno, Apac Celaya, el Colegio Wexford, el Instituto Minerva, el Instituto Vélez, el Colegio Montessori Shanti, el Colegio Panamericano y el Instituto Americano.
Durante la jornada se llevó a cabo una exposición fotográfica titulada “México por los pueblos perseguidos”, conferencias dirigidas al alumnado y otras a padres de familia y docentes, eventos sociales y ceremonias de premiación.
Los exhortan a ser agentes de cambio
El coordinador en México de la Red Pacto Mundial de las Naciones Unidas, Marco Antonio Pérez Pérez, fue una pieza clave en el desarrollo de la segunda jornada Icwimun 2016, quien además de participar como ponente, y avalado por su experiencia y trayectoria, convivió con los niños y jóvenes y los exhortó a convertirse en agentes de cambio que lleven los objetivos de la ONU más allá de esta jornada.
Marco felicitó a los delegados de Icwimun por haber logrado una jornada exitosa y les pidió seguir cumpliendo los objetivos de la ONU y llevarlos a casa, a la escuela y a donde sea necesario para fomentar el respeto, ya que sólo así el verdadero cambio se podrá lograr, aseguró. Además los invitó a no hacerlo solos, siempre hacerlo con más personas, pues así se disfruta más, se vive y se siente mucho mejor, indicó.
“No hay que detenerse, para que el sueño se haga realidad, no sólo portando la bandera de un país, sino portando la bandera de ser humano”, concluyó el ponente.
Cabe destacar que la Red del Pacto Mundial de las Naciones Unidas está presente en 150 países y en México cuenta con más de 720 participantes, lo que la hace la más grande de América y la tercera más grande del mundo.
Durante la ceremonia de clausura que tuvo lugar en la biblioteca de la ULM, se contó con un presídium conformado por: Rosalía Pérez Lemus, directora del Instituto Celayense; Lizbeth Cristina Alarcón, directora del Instituto Sir Winston Churchill; Dominik Kustra, conferencista invitado de Polonia; Marco Antonio Pérez, representante de la Red del Pacto Mundial de México; Julieta Appendini, directora de la Fundación Pontificia que Ayuda a la Iglesia que Sufre; Stefan Baernet, representante de Suecia; Sebastián Carrillo Avecilla, secretario general de Icwimun 2016; y Frida Sofía Narvaez, secretaria junior.
Y como parte del acto protocolario se rindieron honores a la bandera y se recibió a la bandera de las Naciones Unidas, con las escoltas del Instituto Celayense y del Winston Churchill, respectivamente.
Se entregaron reconocimientos a las 14 escuelas participantes y se dieron a conocer las resoluciones obtenidas en cada sesión, otorgando un distintivo a cada uno de los agentes ganadores, para finalmente disfrutar de una presentación de danzas polinesias.