Guanajuato ocupa el quinto lugar a nivel nacional con más madres solteras y León es el municipio donde se encuentra la mayoría de ellas.
De acuerdo con estadísticas del Grupo Unido de Madres Solteras (Gumsac), en 1997 el estado ocupaba el lugar número 15, pero desde hace unos años el porcentaje de mamás solteras se ha incrementado considerablemente.
También aumentó la cifra de madres jóvenes, de entre 12 y 20 años; del año 2000 al 2014 el porcentaje subió de 14.2% a 18.7%, de acuerdo al INEGI.
“Dos motivos de preocupación en términos de políticas públicas en salud reproductiva son: el cáncer de mama, cuyo nivel es similar al promedio nacional (18%) y el porcentaje de nacimientos registrados de madres adolescentes, es decir, menores de 20 años.
“Esta cifra es menor al registrado a nivel nacional (15.4% y 17.2%, respectivamente). Mortalidad materna y embarazo adolescente son dos aspectos que deben ser atendidos de manera más rigurosa si se quiere avanzar en los derechos a la salud y la salud reproductiva en la entidad”, señala un documento elaborado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática y el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer.
El mismo documento establece que “uno de los aspectos que está modificando la vida familiar y, en consecuencia, la de las mujeres, es la creciente presencia de hogares con jefatura femenina. Tanto en el nivel estatal como en el nacional, uno de cada cinco hogares es comandado por una mujer. En cinco
años, la tasa de jefatura femenina aumentó de 20.1 % a 23.0% en la entidad”
De acuerdo con la Encuesta Intercensal elaborada por el INEGI en 2015, en el estado había 403 mil hogares encabezados por una mujer.
Con información del Instituto Municipal de las Mujeres (IMMujeres), la edad promedio de las madres solteras es de 15 a 18 años.
En Guanajuato en el 2014 el INEGI tiene registro de 114 mil 890 nacimientos, aunque no todos son hijos de mamás solteras.
En el estado civil no existe este término, solo es una condición social para las mujeres que ejercen el rol de papá.
Norma Nolasco, directora del Grupo Unido de Madres Solteras, aseguró que en 2010 atendían al mes a alrededor de 100 mujeres, y hoy esa cifra se duplicó.
“Las apoyamos con temas de pensión alimenticia, reconocimiento de paternidad y bolsa de trabajo, somos una organización civil”, comentó.
Trabajo difícil
Mamás solteras entrevistadas aseguraron que les ha resultado difícil criar a sus hijos solas, sobre todo en la cuestión económica y en la educación.
Algunas decidieron no estar con su pareja a causa de la violenci a la que las sometía, para otras el matrimonio no es una opción.
Brenda Sánchez, de 21 años, estudia en la Facultad de Medicina de la Universidad de Guanajuato y tiene una bebé de tres meses.
Sus papás le ayudan con los gastos de la niña, para que ella se enfoque en terminar su carrera.
Habitante de Silao, a diario se levanta para llegar a sus clases, en León, y su hija la acompaña algunas veces.
“Hay veces que me duermo a la 1 ó 2 de la mañana por hacer la tarea y me despierto a las 5 de la mañana para seguir estudiando”, comentó Brenda.
›› ‘Desaparece’ papá
Jaeli Elizabeth tiene un hijo de 3 años al que en septiembre del año pasado le detectaron una infección viral sin cura.
Es una enfermedad, aseguró, en la que que cuando bajan las defensas del niño afecta a los pulmones y riñones.
“Su papá tiene tres meses que lo conoce, él ya está casado y tiene una niña, pero cuando le dije que estaba embarazada desapareció”, comentó Jaeli.
Las consultas y medicamentos le cuestan al mes alrededor de dos mil pesos, pero cuenta con Seguro Popular.
“Tengo que ir al sicólogo porque el humor de mi niño cambia, a veces es muy agresivo y casi no es sociable”, agregó la joven.
›› Rechaza vida en pareja
Karina García tiene 19 años, para ella fue muy difícil decirle a sus papás que estaba embarazada, ya que esperaban que primero hubiera boda y luego nietos.
El papá del bebé tiene una situación económica estable, pero terminaron el noviazgo porque no coincidieron sus maneras de pensar, además para ella la prioridad era terminar sus estudios.
“Es lo más bonito que me pudo pasar, vale la pena el esfuerzo económico pero no le falta nada”, dijo la joven.
En otro caso, Fátima Hernández se embarazó por primera vez a los 15 años, hoy tiene 24 y tres hijos del mismo papá.
Su matrimonio terminó a causa de la violencia doméstica a la que era sometida por su pareja; tiene un niño de 9 años y uno de 3, además de una niña de 4 que no vive con ella sino en un internado.
“Por el momento no busco alguna pareja, ni aceptaría que regresara el padre de mis hijos porque ya me quedó claro que no va a cambiar”, señaló.
Con un sueldo semanal de mil 100 pesos Fátima tiene que solventar los gastos de los dos niños, del hogar y la mensualidad de 500 pesos del internado.
“Lo bueno de todo esto es que no los comparto, yo disfruto a mis hijos y son una razón para salir adelante”, agregó.