En julio del 2015, la llegada de un campus a León de Start Up México se hizo realidad. Las instalaciones del Parque Cien sirvieron como sede de la segunda planta de esta escuela de innovación para emprendedores, que hoy, a casi un año de su arribo, ha cosechado su primera generación.
Fueron 26 proyectos los que se incubaron y ahora pueden llamarse Start Up. Los participantes recibieron asesorías, capacitación, un espacio físico y financiamiento para poder desarrollar su idea.
Aquí presentamos algunos de los proyectos que surgieron de la primera generación.
Polybion
Unicel biodegradable
Un material muy parecido al unicel, pero con características completamente biodegradables y que incluso es nutritivo para el suelo en el que se desecha, funcionando como abono, fue el desarrollo de Axel Gomez-Ortigoza.
El fungicel tiene aplicaciones en las áreas de construcción, empaque, embalaje y envase. Por el momento la Start Up Polybion se enfoca a un primer producto, que es el empaque para vinos, específicamente para los Viñedos SMA.
La entrada del emprendedor a la primera generación de Start Up, Campus León, se dio a raíz de la colaboración con el Parque de Innovación Agrobiotec, en Irapuato, ellos impulsaron a Axel a entrar a la convocatoria.
“Teníamos avanzado el proyecto cuando entramos, pero nos ayudó a delimitar el mercado y nos facilitó vincularnos, tanto con otros parques de innovación como con personas directamente dentro de todo ese ambiente”.
El proyecto lo forman cuatro socios, un financiero, un técnico y dos doctores especialistas, uno enfocado a políticas de calidad y el otro en genética vegetal.
Al salir de la primera generación y a través de un apoyo de Gobierno del estado, ya montan una planta piloto en Salamanca, en el Centro Mexicano de Energías Renovables. El siguiente paso es comenzar a generar una producción a pequeña escala, con clientes que no tengan gran demanda.
Credikoink
Préstamos al instante
“Hoy dependemos mucho de los bancos para poder hacer cualquier transacción o solicitar un préstamo. En lo que estamos innovando, es al crear una plataforma que sirve para solicitar prestamos vía Internet y otros servicios, sin necesidad de un banco en físico, así podemos llegar a más personas de forma poco tradicional”.
Diego Mongelós tenía la idea de un negocio de préstamos enfocados al sector popular, pero por cuestión de riesgos en el negocio, decidió innovar, facilitando microcréditos de mil a 2 mil pesos, en un plazo máximo de 30 días, a personas que tuvieran una emergencia.
Credikoink es una página web en donde hay una calculadora en la que el usuario señala la cantidad de dinero que necesita, el plazo en el que se compromete a pagar -máximo 30 días-, y opciones de pago.
Llega la solicitud de crédito y analizan si el solicitante es sujeto o no; si lo es, un asesor visita a la persona para firmar el pagaré y se realiza el depósito en ese momento.
“La visión general es ser un ‘digital banking’ para que la gente pueda acceder a capital, a pagos o cobros mucho más fáciles.
“El primer paso es hacer micro créditos y en dos año espero que se implementen algunas ideas en concreto para llegar a más personas, no específicamente en préstamos, sino en servicios”, explica Mongelós.
El sitio está diseñado para que funcione en todo el País, pero arrancará en León.
Ponch
Compiten con Google Analytics
El objetivo de Yajaira Rosas y Noreli Curillo es competir directamente con Google Analytics y en un momento dado superarlo.
Hoy en día el quehacer de quienes se dedican al marketing digital, es entender el comportamiento de las audiencias, es decir, en qué horarios, a través de qué dispositivos, desde qué país y ciudad están interactuando los usuarios con las marcas, específicamente en sitios web.
“Desarrollamos un software que permite ver en qué punto del sitio web están interactuando las personas y podemos extraer información adicional de cada una de estos clicks y generamos patrones de comportamiento, que pueden ser trasladados a un tema de negocios”.
Las emprendedoras detectaron que el problema de quienes se manejan a través de páginas web, no es obtener datos y estadísticas, sino saber qué se hace con toda esa información.
“No sólo extraemos esta información, sino además damos planes de acción, les decimos exactamente cuál es el siguiente paso; si necesitan crear un botón, agregar información, si el mensaje no es el correcto para la audiencia, son planes muy específicos que les permiten hacer mejoras dentro del sitio web para aumentar o convertir visitantes a clientes, que es es lo que todo mundo quiere cuando crea un sitio web”.
Yajaira y Noreli sintieron la necesidad de un lugar para echar a andar de lleno a Ponch, y Start Up México fue su alternativa.
Viene 2a. generación
El director de Start Up México Campus León, Edgar Larios, recordó que el proyecto inició en 2014 con un programa de “inversionistas ángeles”, buscando que vieran las start up como una forma de generar patrimonio, invertir y diversificar inversiones.
Luego avanzó la idea de generar un modelo de incubación de alto impacto, y nació Start Up México, Campus León, en 2015.
La primera generación tuvo más de 150 aspirantes y calificaron sólo 60. En la ronda final se depuraron 30 empresas.
La convocatoria a la segunda generación está abierta, y hará su selección a fin de mes.
El perfil de ingreso de Start Up México incluye que los alumnos sean emprendedores, un proyecto con potencial e innovación, y que tengan compromiso y dedicación.