Por generaciones y desde el año de 1940, se mantiene la tradición en la venta de antojitos por parte de la familia Covarrubias Guardado.
Instalados en la plaza principal de esta localidad, ofrecen diariamente crujientes antojitos como son las famosas encueradas, las deliciosas y crujientes papas fritas, así como los dorilocos que preparados son un manjar.
El señor Vicente Covarrubias y su esposa Josefina Guardado actualmente atienden este negocio trabajando todos los días de la semana, desde las 9 de la mañana y terminando hasta las 9 de la noche.
Explicó el matrimonio que la venta de estos productos es toda una tradición; ya sus familiares ya lo atendían cuando estaban ubicados en el cine Teresa, hace un promedio de 40 años, en el centro de la ciudad.
Reconocibles
Dijeron que han pasado décadas y ellos siguen trabajando en el mismo espacio pasando a ser parte del legado histórico del primer cuadro citadino.
Relataron que han visto pasar generaciones y aseguraron, “es difícil acudir a la plaza y no degustar estas delicias”.
Ellos afirman que todo el año es de tienen un volumen regular en sus ventas, sin embargo a partir de septiembre y hasta fin de año es cuando se observa un mayor movimiento.
Agradecieron a la población por su preferencia e invitaron a los que no se han dado la oportunidad de probar estos exquisitos productos para que acudan a hacerlo y disfrutar del centro de la ciudad degustando esta rica botana.