Las muestras de cariño, amistad y agradecimiento quedaron de manifiesto una vez más de parte de cientos de fieles que acudieron a la misa en la que, dio gracias al Creador por un año más de vida, el Pbro. Maximino Rodríguez, quien prestó sus servicios sacerdotales durante años en Lagos de Moreno.
Para agradecer este acontecimiento, el presbítero, mejor conocido como el ‘Padre Chimino’, y varios sacerdotes más concelebraron la Eucaristía en la Parroquia de San José en la ciudad de Jalostotitlán, “El corazón de los Altos de Jalisco”.
Visiblemente emocionado, el festejado agradeció durante su homilía el haber llegado a esta edad con salud y sobretodo con una gran cantidad de personas que lo respetan y lo quieren. Al término de la celebración invitó a todos los presentes a compartir con él en un gran fiesta de cumpleaños.
El marco perfecto para el festejo fue sin lugar a dudas la ex hacienda La Soledad, lugar que albergó a los más de 250 invitados que llegaron de rumbos diferentes y distantes, tales como San Luis Potosí, San Juan de los Lagos, Guadalajara, Ciudad de México y por supuesto Lagos de Moreno, de donde acudieron personas que rentaron camionetas turísticas y autobuses para poder estar este día tan especial con el inolvidable Padre Chimino.
Del vecino país del norte también vinieron familias especialmente a felicitar y a acompañar al festejado. Mencionaron la procedencia y se les brindó un aplauso a los que vinieron de Chicago, San José California y Los Ángeles, entre otras ciudades.
Se ofreció una exquisita birria acompañada de frijoles y arroz, así como el tradicional pastel bellamente decorado. El aspecto musical estuvo a cargo del Mariachi ‘Embajador Azteca de San Julián’ que además de interpretar canciones del gusto del cumpleañero, se prestaron a acompañar las interpretaciones de algunos invitados e incluso del mismo padre Chimino.
Los anfitriones, los fieles de la parroquia de él atiende, fueron los que se encargaron de atender a todos los invitados y de despedirlos amablemente al caer la tarde-noche.
La voz general en este acontecimiento fue la petición a Dios para que conserve mucho tiempo más en este mundo al querido Padre Chimino.