El cáncer es tan antiguo como el hombre: el primer paciente conocido vivió hace 120 mil años y tuvo un tumor en una costilla, un hallazgo que publicó la revista ‘PLOS One’. Desde entonces, la cifra de afectados no para de aumentar, entre otras razones porque cada vez se vive más y el cáncer está ligado al envejecimiento.
Contra algunos detonantes del proceso no podemos protegernos (por ejemplo, alteraciones genéticas hereditarias), pero sí podemos evitar otros.
Según el doctor José Ramón Germá, del Instituto Catalán de Oncología (ICO), un tercio de los casos se evitaría siguiendo una vida saludable. Nada ni nadie puede garantizar el riesgo cero, pero los siguientes consejos anticáncer tienen una eficacia probada.
A continuación, las claves para ponérselo difícil a la enfermedad.
Relájese
No existe evidencia científica de que el estrés piscológico provoque cáncer, pero, según advierte el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, estar nervioso puede llevar a algunas personas a adoptar hábitos que sí favorecen la enfermedad, como son fumar, comer en exceso o abusar del alcohol.
Elija dieta mediterránea
La mala alimentación está detrás del 30% de los tumores, apunta la nutricionista Gemma Morales, del Instituto de Oncología Clínica de la Clínica Corachán (Idoc), e insiste en que no se debe “abusar de azúcares, grasas ‘trans’ o de cocinar a temperaturas altas (fritos, barbacoa)”.
Su libro Plan Anticáncer destaca como aliados “las crucíferas (coliflor y brócoli), algunos tipos de setas (champiñones, ‘maitake’), las frutas rojas y el aceite de oliva”.
Además, hay que alimentar bien la microbiota –bacterias que viven en el intestino-. Para ello, recomienda la achicoria, la zanahoria, la patata hervida fría, el plátano verde y las legumbres “porque tienen un tipo de fibra que ayuda a crecer a las bacterias y, además, reduce el desarrollo de células tumorales en el colon”.
Muchos de estos alimentos forman parte de la dieta mediterránea, que se considera el primero de los 7 pilares anticáncer.
Controle su peso
El sobrepeso y la obesidad favorecen algunos cánceres, como los de mama y colon, según el Centro de Investigación Biomédica en Red Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición.
Por esto, mírese al espejo, no por un acto de coquetería sino para adquirir conciencia de su peso y comprobar si está en un rango saludable. Con independencia de cómo se vea, evite engordar comiendo bien y haciendo ejercicio.
Adiós al tabaco
Si desapareciese el tabaco, se evitarían el 27% de todos los cánceres.
No solo provoca el de pulmón, también está detrás del de laringe, boca, esófago, garganta, vejiga o cuello de útero. Tampoco el tabaco de mascar es más seguro, puesto que favorece los tumores de boca, esófago y páncreas, recuerda el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
Lleve al día sus vacunas
El cáncer de hígado y el de cuello de útero (cérvix) son causados por la infección de los virus B de la hepatitis y del papiloma humano, respectivamente, y para ellos hay sendas vacunas.
“El 20% de los cánceres son de origen infeccioso”, indica el médico José Ramón Germá, y no existen vacunas para protegernos de todas las infecciones potencialmente cancerígenas, pero las que estén disponibles se deben utilizar, porque evitan el cáncer”.
Beba poco alcohol
El alcohol aumenta el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago, laringe, hígado y mama. En su Informe sobre Cancerígenos, el Programa Nacional de Toxicología del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos incluye en la lista el consumo de bebidas alcohólicas. Según esta fuente, cuanto más beba, más riesgo. Para beber con moderación, recomiendan una bebida diaria de alcohol si es mujer y dos bebidas para los varones.
¿Cuánto es una bebida? Un tercio de cerveza, 150 mililitros de vino o 44 mililitros de un destilado (más de 40º de alcohol).
Conozca su herencia
Menos del 10% de los tumores tienen un origen genético familiar, pero conviene conocer el legado de la familia, y actuar en consecuencia. Pese a que el ‘efecto Angelina’ (Jolie, la actriz se extirpó todo el tejido mamario para evitar al máximo la probabilidad de contraer un cáncer de mama, debido a que estaba genéticamente predispuesta) ha marcado el camino a seguir para muchas mujeres portadoras de genes implicados en el desarrollo de tumores de mama y ovario, acuda a las unidades de consejo genético, para conocer las mejores opciones en función de los resultados de cada persona.