Las fluctuaciones del dólar preocupan a los curtidores del estado, que lo mismo venden en el extranjero que importan insumos para sus artículos.
Evangelina Mendoza, responsable de la logística de importación y exportación de la empresa Concurmex, destacó que el alza del dólar les beneficia por ser exportadores.
“El tipo de cambio ha estado incrementando, eso incrementa la balanza de la empresa”.
Pero al importar insumos les perjudica, lo que depende en gran medida del volumen de las compras en el extranjero que efectúen.
Dijo que importan un alto porcentaje de su materia prima, principalmente cueros y químicos provenientes de Estados Unidos.
“Al tener que importarlo nos afecta en la compra”, señaló Mendoza.
Oscar Hernández, gerente general de Curtidos El Cisne, explicó que la paridad del tipo cambiario los afecta ya que sus productos son 100% de importación.
En el momento de pagarlos a un tipo de cambio alto, impacta sus precios.
“Muchas veces nos comentan, que a nosotros nos beneficia porque exportamos”.
Pero sostuvo que el beneficio es en la venta, ya que está es en dólares, pero de la misma manera sus insumos son pagaderos en dólares, por lo que hay diferencia. En su caso, el 70% del cuero es de importación.
Buscan equilibrio
El 90% del cuero que compra la empresa Malpe es de Estados Unidos, expuso Alejandro López Serrano, gerente comercial.
La variación del dólar les afecta, porque el 50% de los cueros que importan se venden en México, pero en pesos.
Para contrarrestar esta situación, buscan un balance y al exportar el precio de venta es mayor.
Los mercados de Estados Unidos y Europa lo aceptan.
“De esta forma se compensa un poco, con el bajo precio que tenemos que dar para ser competitivos a nivel nacional”, dijo López Serrano.
…Y el retraso de Hacienda con el IVA
Otro problema que enfrentan los empresarios del curtido es la lentitud con que el SAT les devuelve el IVA que les corresponde.
Alejandro López Serrano, gerente comercial de Malpe, expuso que en su caso la devolución del IVA afecta de manera directa, pues ellos exportan el 40% de sus productos hacia Estados Unidos.
“Nosotros pagamos más IVA del que transferimos, traemos un problema de rezago, el Gobierno se está tardando más de seis meses o hasta ocho meses en dar contestación a este tema”.
Aunque el desfase en la devolución del IVA los impacta, para ellos esto no ha llegado al grado de tener que disminuir la producción, pero sin duda dijo que es una merma para la compañía.
Ese retraso que tiene el SAT no es solo en la devolución, para que contesten la petición se lleva seis meses.
“Para hacer una devolución se tardan hasta un año”, dijo.
Como empresa están por ingresar al programa IMEX, con el que buscan se facture con tasa 0 la mercancía que tiene destino de exportación, para neutralizar el probnlema.