Sólo un río divide las colonias Piletas, Granada y San José Obrero, pero las tres que colindan tienen el mismo problema: montones de basura y escombro acumulados que no sólo molestan a los vecinos, sino a los deportistas por los animales que se generan y los olores.
“Mucha gente no viene porque les da miedo o por el descuido del lugar, más los muchachos que quieren hacer ejercicio, ven todo tirado; hay hasta un escusado ahí tirado, llantas, y viven hasta indigentes en todo el tiradero”, comentó Patricia, vecina de la colonia Granada.
En algunas alcantarillas, el paso del agua, cuando llueve, es prácticamente imposible; el acumulo de basura e incluso animales muertos ayudan a que se generen malos olores y no pase el agua a donde debería.
Montañas de tierra mezcladas con costales de construcción, latas, plásticos y mucha más basura se pueden apreciar por todo el contorno del río.
“Siempre es lo mismo, a veces nosotros limpiamos y cuando menos pensamos ya está todo tirado otra vez. A veces son los mismos muchachillos que hacen sus relajos en la noche, y eso también ya nos tiene cansados porque cuando se pelean no hay ni quién los aguante; vuelan piedras, sacan cuchillos y de todo”, expresó otra señora de la colonia San José Obrero, quien prefirió omitir su nombre en anonimato.