El hombre en silla de ruedas que fue asesinado en la colonia Del Bosque, la tarde del miércoles, presentó ocho impactos de bala y en las investigaciones del Ministerio Público se supo que contaba con antecedentes penales por los delitos de robo y lesiones.
La Subprocuraduría de Justicia en la Región C informó que a las 1:30 de la tarde del miércoles, policías municipales reportaron el asesinato a la Unidad Especializada en Investigación de Homicidios.
Agentes en Investigación Criminal (AIC) acudieron a la avenida Peral, casi esquina con Prolongación Guanajuato, donde observaron el cuerpo de un hombre tirado en la banqueta, a un lado de una silla de ruedas y afuera de un negocio de vinos y licores.
“El occiso fue identificado como Fernando Uriel Soto Chávez, de 35 años, quien fue objeto de un ataque por personas armadas. Uno le disparó en varias ocasiones y perdió la vida. Los agentes recaudaron los indicios y encontraron casquillos percutidos”, dijo el subprocurador René Urrutia de la Vega.
En las investigaciones se supo que Fernando Uriel se encontraba bebiendo bebidas alcohólicas afuera del negocio cuando llegaron dos hombres abordo de una motocicleta, uno sacó una pistola y le disparó, luego huyeron.
Debido a los múltiples disparos, cayó de la silla de ruedas y testigos reportaron el hecho a la Policía.
Personal de Servicios Periciales encontró 5 casquillos percutidos calibre 9 milímetros.
Médicos forenses levantaron el cuerpo para trasladarlo a sus instalaciones, para la autopsia de ley determinar que la causas de la muerte fueron las heridas de bala penetrante en cráneo, tórax y abdomen.
Urrutia de la Vega informó que Soto Chávez utilizaba la silla de ruedas porque sufrió un accidente automovilístico y se recuperaba de las lesiones, también mencionó que contaba con antecedentes penales por los delitos de robo y lesiones, en 2007 fue atacado a balazos pero sólo resultó lesionado.