Hasta la tarde de ayer habitantes de la colonia Valle de Campestre seguían limpiando sus casas, negocios y calles después de la lluvia registrada el sábado.
El nivel del agua alcanzó el medio metro de altura dentro de las viviendas.
Las piedras y la tierra del parque ubicado en la misma colonia fueron arrastradas por la corriente, dejándolas regadas por las vialidades.
Quienes llegaron la mañana de ayer a abrir sus negocios u oficinas se encontraron con la sorpresa de que el agua estaba hasta en los sótanos.
“En la casa el agua se metió por todos lados, muchas cosas que tenía en la covacha se echaron a perder”, comentó Inés Aguirre, de la calle Valle de Oaxaca.
Un despacho de abogados ubicado en la misma vialidad también se vio afectado.
“Me avisaron lo que pasaba y vine a ver cómo estaba y el agua arrancó la defensa de mi Jeep”, dijo Rosa María Reyes Nicasio, ex presidenta del Colegio de Abogados de León.
Hubo vecinos que al darse cuenta de que el agua entraba a su casas optaron por no abrir las puertas, ya que detenían un poco la corriente.
“Duramos tres horas echando el agua con cubetas por el inodoro, abrimos la puerta y se metió el chorro; ya movimos los muebles porque sí subió bastante el nivel”, narró Mercedes Ramírez Limas.
Alrededor de 13 vehículos resultaron con serios daños.