Escasean empuntadoras que dan el toque mágico a la tradicional prenda del rebozo.
Según miembros de la Sociedad Cooperativa Textil Artesanal es importante que el gobierno municipal o estatal ofrezca una capacitación pagada que rescate esta actividad piedadense.
José Armendáriz miembro de esta organización sostuvo que esta actividad se ha sostenido gracias al importante papel que juegan las empuntadoras al darle el terminado al rebozo de manera cien por ciento manual.
Recordó que es todo un proceso la elaboración de un rebozo y ellos en los telares que manejan de manera manual, hacen una importante parte, sin embargo falta el toque mágico que le de vista a la prenda, en este caso en ambas puntas.
Remarcó que es importante aprender de la técnica y que se interesen las nuevas generaciones, ya que se pueden lograr laboriosos diseños y es ahí donde se requiere la aportación gubernamental.
Remarcó que en la Sociedad textilera de la que forma parte no ha dejado de producir, sin embargo si les llegara un pedido fuerte, difícilmente lo cubrirían ante la escasez de personas que hagan el empuntado.
Aceptó que es poco lo que se le paga a una empuntadora, que va desde 65 pesos el rebozo más laborioso y hasta los 35 el más sencillo.
Por lo que dijo que, tal vez se deba a eso que ya no le apuestan las nuevas generaciones a aprender este noble oficio.
Invitó a la autoridad a impartir una capacitación pagada, con lo que se pueda incrementar el número de personas que realicen esta actividad.
Recordó que Michoacán es uno de los pocos estados del país donde aún se preserva una rica industria de rebocería tradicional, y se encuentran grandes ejemplos donde este trabajo se ha convertido en la base de la economía local de varios pueblos en zonas rurales y urbanas, de ahí la necesidad de preservarla.