Las miles de personas que la tarde de ayer realizaron la manifestación más multitudinaria que se recuerde en Celaya, asistieron con la intención de defender su postura a favor de la familia.
Y otros manifestaron estar en contra del nuevo modelo educativo que pretende brindar educación sexual a temprana edad.
“No estoy de acuerdo en la ideología que ahora traen, precisamente porque tengo una hija menor y no me gustaría que se confundiera con estas ideas”, compartió Georgina Rodríguez.
Al cuestionarle si tenía conocimiento pleno de las nuevas reformas en el modelo educativo, nerviosamente dijo que “lo que se quiere reformar es la ley que es incluso en los libros de texto, les difundirán que pueden ser libres de elegir su sexualidad”.
En cambio, la psicóloga María de Jesús dio su punto de vista desde la perspectiva en la cual el niño pueda crecer en un entorno en donde sus padres tienen el mismo sexo.
“En la carrera vemos mucho lo que se necesita para conformarse como un ser humano sano, entonces puede ser que algún hijo pueda crecer y educarse con un solo padre, pero de alguna manera otro miembro de la familia son sustitutos, pero así siento que es muy difícil tener la identidad de los sexos, si son dos hombre o dos mujeres”.
A pesar de que más de 11 mil personas se manifestaron de forma pacífica a favor de la familia, otros ciudadanos que observaban, compartieron su rechazo a este tipo de manifestaciones.
La familia Olvera Juárez fue una de las cientos de familias que asistieron, pues están a favor de la realización de la marcha y se “proclame la naturalidad de la familia”.
“Leí unos memes en internet en oposición a esa marcha, en virtud de que no estábamos consientes ni respetando las familias diferentes, sin embargo, yo creo en la familia biológica y natural, puesto que todos descendemos de un hombre y una mujer, no estoy en contra de las personas que tienen convivencia homosexual, ellos tienen que respetar lo que nosotros le enseñamos a sus hijos”, comentó el padre de familia, acompañado con su esposa y su hija.
Una protesta silenciosa
Poco a poco comenzaron a avanzar los asistentes, a los que no les importó que los rayos del sol cayeran a plomo y de manera silenciosa las miles de personas que se congregaron manifestaban su postura de forma pacífica.
En la segunda fila, tres niños encabezaban la manifestación con una manta en la que aparecía un niño y un corazón rosa con el lema “mamá + papá se unieron y nacimos nosotros”, junto a ellos, dos niñas portaban una fotografía de sus padres el día de su boda.
Bajo este concepto, cientos de cartulinas y mantas se podían apreciar a lo largo del bulevar, como las de “un niño y una niña necesitan de un papá varón y una mamá mujer”, “estoy aquí porque amo a mis hijos”, “no destruyan la inocencia de los niños”, “EPN respeta la institución básica del Estado”, entre otras frases.
A las 6 de la tarde con 40 minutos el primer contingente arribó a la altura del puente del Mercado Hidalgo, donde la gran mayoría de personas comenzaron a aplaudir.
En ese momento la marcha alcanzó su momento más álgido, donde decenas de personas se unieron a la misma para llegar a la calle Luis Cortazar y regresar hacía el poniente de la ciudad.
Pasadas las 8 de la noche, las últimas personas arribaron nuevamente a las antiguas instalaciones de la feria para dar por concluida la marcha por la familia.
Reportes de la dirección de Protección Civil del municipio indicaron que dicha manifestación pacífica culminó con saldo blanco y número aproximado de 11 mil 200 asistentes.