La administración pasada pagó 12 millones de pesos, de nuestros impuestos, por 3 torres de seguridad armadas en una carrocería de San Juan del Río, Querétaro.
Las casetas móviles reforzarían la seguridad de la ciudad, sin embargo, a los 8 meses dejaron de funcionar.
Una de las torres está arrumbada en el estacionamiento de Plaza Mayor. Se descompuso en junio de los sistemas eléctrico e hidráulico, al no soportar el peso de la caseta.
Otro de los equipos presentó las mismas fallas desde hace un año y está arrumbado bajo los rayos del sol en un taller hidráulico ubicado en la colonia San Felipe de Jesús.
La tercer torre, con las mismas fallas eléctricas e hidráulicas, está desde enero en las instalaciones del Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo (C4), luego que la cabina cayera al suelo en el traslado de Centro Max a las instalaciones de la Feria.
Las casetas fueron armadas sobre unas grúas que no resistieron el peso; además, los equipos electrónicos de seguridad son de fabricantes chinos y no pudieron coordinarse con los sistemas de transmisión de datos emergentes del C4, como se había anunciado.
Las tres torres presentan fallas hidráulicas y eléctricas por mal ensamblado de piezas de la carrocería.
Ante la sospecha de irregularidades, el secretario de Seguridad Pública, Luis Ernesto Ramírez Saldaña, solicitó a Contraloría Municipal se abra una investigación.
La compra se realizó sin licitación. El contrato está firmado por la entonces alcaldesa Bárbara Botello; el secretario del Ayuntamiento, Martín Ortiz; el tesorero Roberto Pesquera; el secretario de Seguridad Pública, Francisco Javier Aguilera; el director de Compras, Roger Christian Jones; la directora administrativa de Seguridad Pública, Lucía González y el titular de Compras, Carlos Carrillo.
Ramírez Saldaña precisó que las torres no cumplen con estándares de vigilancia y no son indispensables en la estrategia de seguridad.
Un responsable del taller de reparación CPI S.A de C.V. donde se encuentra una de las torres, explicó que la empresa “armadora” no tomó en cuenta el peso de la caseta. Esto provocó diversas fallas en la tarjeta de control.
‘Tecnología de punta’
El 18 de febrero de 2015, la entonces alcaldesa Bárbara Botello inauguró las 3 torres de vigilancia móvil con “tecnología de punta”.
La acompañaron el titular de Seguridad Pública, Francisco Javier Aguilera Candelas y del director del Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo (C4), Adolfo Yllades.
Las casetas móviles vigilaban las entradas y salidas de la ciudad, centros comerciales, bulevares y avenidas principales, y eventos masivos. Además estaban supuestamente conectadas al C4 para trasmitir datos.
Se proyectaba insertar cámaras detectoras de vehículos robados en las cabinas, pero no se concretó.
“La tecnología de punta” solo duro ocho meses. Las torres están en desuso desde el inicio del trienio de Héctor López Santillana en la Presidencia Municipal.
Una torre se encuentra estacionada en Plaza Mayor; la cabina está a ras del suelo, nadie está pendiente de ella.
Personal de seguridad del centro comercial aseguró que solo funcionó 2 meses, después no volvió a elevarse.
En los últimos 5 meses el policía responsable de la caseta dejó de ir de manera regular e incluso pasan días sin que nadie la abra.
“Fueron 2 meses que funcionó e incluso el policía se reportaba y firmaba en las oficinas junto con nosotros, y atendía las emergencias en su patrulla. Dejaron de hacerlo, hay días que nadie se para”, dijo un vigilante privado de Plaza Mayor.
“Nomás está de adorno y estorbando”, comentó su compañero.
Otra caseta está almacenada en el C4, luego de que en enero de este año en un traslado cayó al suelo.
La tercera torre, desde hace un año, se encuentra bajo los rayos del sol en un taller que repara grúas ubicado en Fray Daniel Mireles, San Felipe de Jesús.
Los trabajadores del lugar no proporcionaron información de la reparación.
Autorizan compra
“armada”
En septiembre 2014, el Comité de Adquisiciones de León, autorizó sin licitar la compra de las 3 casetas móviles de vigilancia.
El recurso canalizado a través de Subsemun, estaba destinado a la compra de 30 videocámaras y finalmente, se aplicó en las torres.
Los integrantes del comité integrado por los exsíndicos Eugenio Martínez, Luis Fernando Gómez y los exregidores Alejandro Kornhauser y Alejandro Arenas, aceptaron la compra.
Alfredo Carrillo, director de Adquisiciones en sustitución de Christian Jones, y Roberto Pesquera, también autorizaron la compra de las casetas al igual que Iván de Jesús Amaro Hernández, titular de la Policía, quien validó la adquisición.
Las casetas elevadas de seguridad que adquirió el municipio no existen en el mercado por lo que se compraron las piezas para armar cada una.
El contrato de 12 millones de pesos fue asignado a la empresa ADAMED S.A. DE C.V. bajo el nombre comercial FERBEL Carroceros.
La compañía se ubica en La Estancia, San Juan del Río, Querétaro.
La carrocera en su página de internet anuncia la modificación de vehículos móviles de emergencia, médica, seguridad y proyectos especiales; también ambulancias, carrozas fúnebres, campers, patrullas, blindaje, transporte de discapacitados y torres de seguridad.
Las 3 torres telescópicas de seguridad móviles consisten en una caseta montada sobre una plataforma conocida como tijera que se eleva 15 metros.
La cabina cuenta con red interna para transmitir datos, 3 monitores, un videograbador, dos cajas de control de cámaras, 2 lámparas de led, aire acondicionado, un archivero, 2 sillas negras de oficina, un extintor y planta de luz.
Por fuera tiene una sirena, 4 cámaras, 2 bocinas, 2 reflectores, un tanque de gasolina y valla perimetral.
La estructura de la caseta es de acero al carbón y material aglomerado de plástico, vidrios de las ventanas tipo espejo oscuros y 8 códigos de emergencia.
La plataforma tijera es marca Haulotte, fabricada por una empresa argentina. am pidió una cotización del modelo y su valor es de 62 mil 968 dólares. Los equipos se adquirieron en 2014 cuando el dólar se cotizaba en 13.47 pesos. Es decir, costaron cerca de 848 mil 181 pesos.
Las cámaras y videograbadora son de la marca Mariva Security, empresa de Guangzhou, China, que vende sus productos en línea.
Las sillas de oficinas tienen un costo en Office Depot de 870 pesos. Un extintor de 2 kilos no rebasa los mil pesos.
Los monitores de marca BenQ, en la tienda de la misma marca se ofrecen en 2 mil pesos.
Un reporte del taller hidráulico que “guarda” una de las torres, dice: “En relación a las torres de vigilancia te comento que el fabricante de la unidad Haulotte nos ha indicado que la empresa que les vendió el equipo, y que instaló la caseta así como todos los periféricos, no consideró la capacidad de carga de la plataforma rebasando esta; por tal motivo se han producido las diversas fallas en la tarjeta de control de peso”.