Organizaciones, activistas y legisladores cuestionaron que el recién nombrado Procurador General de la República, Raúl Cervantes, pueda convertirse en Fiscal General.
“Joder al País es nombrar a un Fiscal General de la República que sea militante de un partido político, primo del consejero jurídico de la presidencia y que sea además abogado en ejercicio”, señala la organización ciudadana México Unido Contra la Delincuencia, en un comunicado.
“Joder al País es permitir que el Presidente de la República nombre a un Fiscal General sin consensuarlo con el resto de los partidos y representantes de la Judicatura, no sólo con sus amigos, sin discusión pública y sin consensuar su refrendo en las Cámaras”.
El miércoles, Cervantes fue ratificado como titular de la PGR en el Senado, donde reveló sus aspiraciones de ocupar el puesto de Fiscal General.
Justine Dupuy, coordinadora del Centro de Análisis e Investigación Fundar, consideró que el nuevo Fiscal no debe tener vínculos políticos, ni económicos que comprometan su independencia, lo que sí tiene Cervantes.
“Estoy convencido que es la persona apta para el cargo de Procurador, pero no en automático será Fiscal, falta que se discuta eso en el Senado”, dijo el panista Jorge Lavalle.
“Es interpretación de que sea en automático. Sigue siendo Procurador, no Fiscal”, destacó el perredista Zoé Robledo.
Desde diciembre de 2014, en el Senado permanece congelada una propuesta de nueva Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, cuyo titular dejaría el cargo hasta 2025.

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