Hilda Teresita Cardona Ramírez dejó este mundo, luego de su lucha contra el cáncer de colon.
Con su partida, los corazones de sus seres queridos y quienes la conocieron en vida, atesoran su recuerdo.
Oriunda deLeón, nació en el seno de una familia formada por José Vidal Cardona Navarro (+) y María Teresa Ramírez de Cardona. (+)
Realizó sus estudios de educación básica en la Escuela Comercial Bancaria y al graduarse de secundaria decidió dedicarse a dirigir el negocio de la familia: la fabrica de calzado VI-CAR.
Ya al mando de la empresa, la joven de apenas 16 años empleó todo su tiempo y esfuerzo para impulsar el desarrollo del negocio, haciéndolo crecer y generando un ambiente laboral más cordial para sus trabajadores, quienes la recuerdan como una gran jefa, llena de alegría.
Gracias a su belleza y sobre todo su gran carisma, a los 19 años Teresita fue elegida como Reina del Club Deportivo Atenas.
Entre sus grandes pasiones estaba el deporte, le encantaba practicar tenis, natación y la charrería, siendo merecedora a varios trofeos y resultando ganadora de muchos concursos en esta última disciplina.
Hasta la fecha, es considerada como una de las mejores escaramuzas que ha dado la región.
También fue nombrada Reina de la Asociación de Charros de León, lo que la llevó a competir en varias ciudades de la República como: Guadalajara, Ciudad de México y Lagos de Moreno, entre otras.
Ella siempre fue muy cercana a su familia. Cada que Teresita regresaba de una competencia ecuestre, compartía todas sus aventuras con sus papás y hermanos, siempre con una gran alegría que se reflejaba en el brillo de sus ojos.
A los 23 años procreó a su primera y única hija, Adriana Díaz de Sandi Cardona.
Para cuidar a su pequeña hija, decidió descansar del trabajo durante una larga temporada. La disfrutó con amor y apapachos. Para ella, su hija fue siempre “el gran amor de mi vida”.
Teresita amaba sorprender a su primogénita con muchos detalles.
Disneylandia, Nueva York y Las Vegas fueron algunos de los lugares que visitaron juntas.
Llevar una vida llena de valores y buenas lecciones, como trabajar y luchar para ser mejor cada día, fueron algunas de las principales metas de Teresita en su rol como mamá.
“Gracias hermana por tanto amor, cariño, alegría y todas las cosas maravillosas que compartimos. Por todos los momentos que me cobijaste, jamás podré olvidarte; me dejaste la herencia más hermosa, todos los momentos inolvidables llenos de risas y alegría”, dijo entre lágrimas Alicia Cardona, para despedirse de su hermana.
Un ser humano con un gran corazón que procuraba la unión entre primos, tíos, hermanos y demás miembros de la familia Cardona.
Será recordada siempre por sus seres queridos como “el alma de las fiestas”.
Descanse en paz quien fuera una mujer fuerte y de gran carácter.
Un regalo de unión y buenos recuerdos
Hilda Teresita Cardona deja un legado de historias y grandes lecciones en los corazones de quienes disfrutaron de su alegría y su amor por la vida.